¿Usted sabe mucho sobre los antecedentes profesionales de su amigo? ¿Cuál es su trayectoria y reputación con los empleadores anteriores y los compañeros? Hágase estas preguntas antes de prometerle a su amigo que lo recomendará para algún puesto de trabajo en la empresa donde labora.
De no conocer su historial profesional, entonces dedíquele un breve tiempo para conocer dichos antecedentes y tener una mejor idea de lo que ha hecho profesionalmente. El amigo con el que siempre se puede contar para salir a comer una pizza puede no ser el mismo con el que se desea vincular laboralmente.
El paso siguiente tiene que ver con un planteamiento simple. Infórmele a ese solicitante de empleo la misión, visión, valores y objetivos organizacionales de la compañía en cuestión. Conozca cuál es su opinión y, si sus actitudes, capacidades y habilidades encajan con el perfil buscado. Sepa si él o ella está realmente interesado en el puesto.
Luego pregúntese cómo lo verían a usted en el trabajo, en caso de que su amigo sea contratado. Piense en la forma en que sus colegas reaccionarían, y si está dispuesto a ofrecer una respuesta al respecto.
Su reflexión no debe quedar ahí. Analice si esa empresa es conveniente para dicho amigo, esto es, para su línea de carrera. También pregúntese si esta persona se llevaría bien con sus colegas. Por supuesto, limítese a ofrecerle información clara, concisa y objetiva acerca la realidad de las cosas.
Por último, evalúe si podría trabajar eficientemente al lado de esa persona. Si usted es empleado de una gran empresa y su amigo esta trabajando en otro departamento, esto no debería ser un gran problema. Pero si usted esta trabajando en estrecha colaboración con él o ella y cree que afectaría negativamente su rendimiento, podría reconsiderar la referencia.