Ante la consideración general de que la añejes de un vino determina su calidad, el reconocido sommelier peruano Giovanni Bisso desmiente esta teoría, pues asegura que la mayoría de vinos en el mundo (alrededor del 90%) son jóvenes y están listos para ser disfrutados durante sus primeros años de vida.
“El vino añejo responde a un grupo de bebidas que cuesta mucho dinero y tiene capacidad para ser guardado durante muchos años. Además, mejora a lo largo tiempo, pero eso tampoco significa que durará toda la vida”, precisó el también asesor de Supermercados Peruanos y del Grupo Acurio. Solo el 10% de la producción puede acceder al privilegio de ser añejado en botella. Creer lo contrario es un error.
La preservación es un arte
En cuanto a las condiciones en las que se debe conservar un “vino de guarda”, Bisso señaló que lo ideal es contar con una cava (máquina para guardar este tipo de bebidas) y mantener las botellas echadas, bajo poca luz y dentro de un ambiente con aire acondicionado. “El vino es un ser vivo y necesita ciertas condiciones para vivir bien”, apuntó.
No obstante, según Bisso, tambien resulta importante saber en qué momento tomar un vino. “Una cosa es cuánto tiempo dura o vive un vino y otra cuándo es el mejor momento para tomarlo. Si un vino dura 30 años, lo ideal es abrirlo cuando tenga 18 o 20 años”, recomendó el sommelier. Además, debido a su calidad –sostuvo–, los vinos sudamericanos tienen una vida más corta que los top europeos.
En esa misma línea, anotó que invertir en vinos es bastante rentable en Europa. Ante la crisis financiera, muchas personas han invertido su dinero en adquirir vinos de grandes cosechas, marcas reconocidas y zonas famosas, ya que en los próximos 10 ó 15 años dichas bebidas tendrán un mayor valor. En palabras de Bisso, “es una inversión segura”.