Es común el temor de muchas personas, cuando se detienen a mirar sus billeteras, carteras y hasta sus bolsillos ad portas de celebrar el Día de San Valentín o para muchos, el Día de los Enamorados, ya que el miedo por desbalancear presupuestos se podría agudizar más en el preciso momento de la celebración.

Para evitar cierta fricción en este día tan esperado por las parejas, y descartar futuros dolores de cabeza por las consecuencias de los gastos excesivos, el director ejecutivo de Prestaclub, Luis Sánchez, resalta en entrevista con Gestión.pe, cinco recomendaciones para gozar de un grato momento sin preocupaciones previas ni posteriores.

1. Sincerarse (“financieramente”) con la pareja
Para celebrar bien, y sin contratiempos su San Valentín, es importortante sincerar finanzas personales con la pareja, en caso de que el presupuesto de ambos se encuentre ajustado por estas fechas.

“Ese día se suele gasta más de lo acostumbrado. Hay gastos como la cena o alguna salida especial que mayormente no están presupuestas. Por lo tanto, si es que se sincera previamente el presupuesto de pareja, la expectativa se reduce”, anotó Sánchez.

Precisó que así, el hombre o la mujer no esperarán una salida inesperada a un determinado lugar, y menos un regalo sorpresa de su respectiva pareja; detalles que si bien pueden resultar emocionantes, al no estar planificados podrían pasar factura en los siguientes meses, o en menos tiempo.

2. Consensuar presupuestos
Sánchez afirmó que es vital para esta fecha realizar un presupuesto consensuado, a modo de presupuesto familiar.

“Los gastos que se hagan en San Valentín tienen que salir a partir de un presupuesto inicial. Dentro de la pareja, deden tener un presupuesto que contemple los gastos que afecten a ambos usualmente, y a parte de ello, deben tener el presupuesto personal, que no afecte el gasto de pareja o familiar, según sea el caso”, detalló.

Así, recordó que el presupuesto de la pareja o familiar si se trata de un matrimonio, debe cubrirse con los ingresos económicos de ambos.

3. Óptimo uso del gasto personal
“Una vez que se haya hecho el presupuesto consensuado, sabes cuanto te quedará de presupuesto para gastos personales. Entonces, en una fecha con la de San Valentín, lo que se tiene que hacer es que el monto que va a gastarse, en una sorpresa, en un almuerzo o en una cena, tiene que venir necesariamente del presupuesto que va a ser aplicado al gasto personal”, explicó.

En ese sentido, recomendó que no se recurra al dinero del presupuesto familiar, pese a que en la gran mayoría de los casos se hace lo contrario.

4. Planificar el gasto dirigido para el 14
No está demás remarcar que la planificación es el aliado perfecto de las finanzas personales. Es por ello que el experto aseguró que planificando con anticipación el gasto por San Valentín, las parejas obtendrán mejores precios de los productos o servicios a adquirir ya que tendrán mayor capacidad de negociación.

“Si por ejemplo, decides hacer una reserva en un hotel o para una cena, es más factible que cuando se realice ello con anticipación, se obtenga descuentos en los precios, o algún servicio adicional, lo que genera ahorros o beneficios con detalles adicionales”, expresó, recordando que muchas veces se opta por hacer todo esto en el último momento.

5. Priorizar la experiencia sobre el gasto
Usualmente se antepone el gasto con el propósito de consentir o complacer a quien consideramos nuestra “media naranja”. Pero el especialista sugiere que comencemos a imponer lo que sería una grata y acogedora experiencia por encima de lo que se pueda desembolsar.

“No necesitas gastar mucho en esta fecha, para hacer que la experiencia sea formidable. No debemos maximizar el gasto sino la experiencia. Y para eso no necesariamente lo más costoso te va brindar algo maravilloso.

En relación a ello, sugirió considerar más que las “sorpresas” de alto costo, esos detalles inusuales que quizás muchos no los piden directamente, pero que en el fondo los anhelan.