(Bloomberg).- Finalmente. Después de 10 largos años de no existencia, el Acura NSX está de vuelta. Pasé varios días con el icono completamente rediseñado el pasado fin de semana en el Pikes Peak International Hill, esa carrera de 99 años de antiguedad en la que los conductores alcanzan alrededor de 150 mph en 156 vueltas en un curso de 13 millas.

Todavía no estaba listo para la producción, y ya se enfrenta a algunos retrasos en la producción que tienen que ver con el motor. A pesar de los planes iniciales, el Acura no me dejaría fotografiar su interior, por no hablar de conducirlo. Pero sí pasamos mucho tiempo filmando la montaña de 14,114 pies.

Dos décadas después de que creó la carrera corta, después de su debut en el Gran Turismo, Honda dijo que era sólo cuestión de meses antes de que se revelara la versión moderna ante un público entusiasta. “A principios del otoño, A principios del otoño”. Esperemos. Ha tenido el tiempo suficiente.

Ese prototipo hizo muy buen trabajo para mantenerme ocupado en el ínterin. Como sabemos de su debut a principios de este año en Detroit, tiene un motor V6 turbo emparejado con tres motores eléctricos.

Me sentí escéptico acerca de cómo los puristas NSX responderían a un motor turbo en lugar de algo parecido a la tracción trasera de aspiración natural del NSX original, pero los ingenieros del Acura defendieron la nueva configuración, diciendo que el par inmediato de un motor eléctrico combinado con el poder sostenido de un turbo calza con el motor.

Ni siquiera se trata de eficiencia, se trata de rendimiento. La combinación da el máximo empuje en todo momento. Todo suena plausible, aunque me abstendré de hacer un juicio definitivo hasta que pueda conducir la versión de producción.

Otros detalles del NSX 2016: 9 velocidades de transmisión de paddle – palanca de cambios y en todas las ruedas. Tendrá entre 500 y 600 caballos de fuerza y, de acuerdo con el conductor Sage Marie de Acura, obtenga los números “competitivos” con los similares del Audi R8. Por cierto parece sorprendentemente similar.

El NSX se convirtió en un símbolo de estatus por su cuerpo ligero y de fines de los años 80. Inspiró a varios autos que incluyen el McLaren F1. Esta nueva versión cuenta con la misma línea ligeramente redondeada del Audi, con aberturas delanteras audaces. Tiene más personalidad que el R8, un aspecto más preciso. El efecto visual está en su punto.

En cuanto al efecto de manejo, Marie dice que hay que esperar frenos con reflejos de azogue. Dice que hay que esperar para olvidar que estás en un auto.

“La idea es que cuando conduces un NSX, se siente como si el auto se cae y eres sólo tú y el camino”, me dijo durante la carrera del sábado en Colorado. El nuevo chasis, el motor y la transmisión fueron desarrollados por Honda en Japón y por los ingenieros en Ohio. Actualmente están trabajando para aligerar el exceso de peso del auto, ya que el sistema híbrido añade mucho a lo que normalmente se debe tomar en cuenta en un coupé deportivo.

Todo va a ser fabricado en Ohio, una vez que comience la producción. Las estimaciones de gastos para el Acura NSX 2016, según Marie, será de alrededor de US$ 150,000.