Este año, Exsa obtuvo un reconocimiento como empresa innovadora del “Premio a la Innovación Tecnológica en el sector Minero-Energético 2016” debido a su nueva Tecnología Quantex capaz de reducir 18% la huella de carbono y otorgar hasta un 30% de ahorros en costos operativos mineros.
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Producto de una crisis interna en Exsa, surgió la nueva tecnología Quantex, “en donde miramos al sector de los fertilizantes y encontramos un sustituto que hoy se ha convertido en el 50% de los explosivos que se usan en el Perú en menos de dos años”, explica Tommy Muhvic-Pintar, Gerente Regional de Marketing, Exsa.
Además, indica que esta tecnología está orientada a las operaciones mineras de tajo abierto, ofrece ahorro en costos e insumos para voladura y alta calidad de resultados en los procesos de fragmentación.
“Una empresa peruana es capaz de enfrentar un reto tecnológico de tal magnitud, y demostramos que somos capaces de encontrar soluciones. Por eso es necesario entender mejor cómo funciona el sistema”, agrega Muhvic-Pintar en su pase por la Expomina 2016.
Para ello tuvieron que integrarse con startups, academias, y contaron con asesoría del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT, siglas en inglés) para su desarrollo.
Realidad tecnológica minera peruana
“Deberíamos fortalecer este espacio entre la empresa peruana, la academia y el estado, para conversar como hacer llegar más rápido la tecnología. Además, hay que salir fuera de Perú para ver qué es lo que bueno que se está haciendo y replicarlos aquí.
La tecnología es tan avanzada ahora que es posible cambiar a nivel atómico la composición de algunos elementos y elevar su temperatura. “Te enfrentas a estas cosas que son nanotecnología y que en unos 3 años podrían generar una disrupción mayor en la minería y tenemos que estar preparados”, indica.
Según prevé Muhvic, dentro de muy poco seremos capaces de capturar el 80% de energía que se libera de las voladuras que ahora se pierde entre energía dinámica, energía térmica, y se convertirá en energía eléctrica para retroalimentar una planta. “Pero hoy se desperdicia porque no hay forma de capturarla”, afirma.