Ciudad del Vaticano (Reuters).- Las puertas de la Capilla Sixtina se cerraron el martes, dejando al interior a los 115 cardenales católicos romanos al comienzo del cónclave para elegir al próximo Papa.
Los cardenales realizaron una procesión hasta la Capilla Sixtina orando por ayuda divina para elegir al hombre que sucederá a Benedicto XVI en uno de los momentos más difíciles en la historia de la Iglesia.
Con la orden en latín “Extra Omnes” (todos afuera), el maestro de ceremonias ordenó a todos los que no están involucrados en la votación secreta que dejaran la capilla.
Las puertas se cerraron. A unos pocos asistentes se les permite permanecer adentro para ofrecer asistencia pero deben dejar el lugar cada vez que los cardenales voten.