(Bloomberg).- Es probable que la productividad sea la medición más importante de la salud económica de la cual las autoridades menos saben.
Su ritmo contribuirá a determinar la rapidez con que la presidenta de la Reserva Federal de los Estados Unidos , Janet Yellen , y sus colegas subirán las tasas de interés y cuánto ascenderán éstas.
Un avance más rápido exigiría un incremento posterior debido a que la economía de EE.UU. tendría más margen para acelerarse antes de encontrar limitaciones a su capacidad. También requeriría un punto final más alto a los efectos de evitar que una expansión más pujante termine en un recalentamiento. Una productividad más lenta haría que hiciera falta instrumentar la estrategia opuesta.
El problema, según el ex vicepresidente de la Fed Alan Blinder, es que los economistas –entre ellos los de la Fed- no tienen mucha idea de la rapidez con que aumentará la productividad en los próximos años.
La tendencia a largo plazo es “en extremo importante”, pero “puede llevar años” detectar cambios, dijo en una entrevista.
Yellen presentará los puntos de vista del banco central respecto de la política y la economía cuando exponga ante el Congreso esta semana. En su reunión del 27 y 28 de enero, los funcionarios analizaron el momento y el ritmo de posibles incrementos de la tasa. Muchos se inclinaban por mantener la tasa de fondos federales de referencia cerca de cero “durante más tiempo”, según las minutas de la reunión que se difundieron el 18 de febrero.
Tendencia de ritmo de crecimiento
John Fernald, un asesor de análisis del Banco de la Reserva Federal de San Francisco, estima que la tendencia del ritmo de crecimiento de la productividad será de 1.8% anual para las empresas de los Estados Unidos y de 2.1% para la economía en su conjunto.
Sus pronósticos indican un aumento de tasas por parte de la Fed este año por primera vez desde 2006, dijo Dale Jorgenson, un profesor de la Universidad de Harvard en Cambridge, Massachusetts, y ex presidente de su departamento de Economía.
El margen de error del pronóstico de Fernald es amplio, y él es el primero en admitirlo.
“Hay un 80% de probabilidades en los próximos 10 años de que el crecimiento de la productividad promedie entre 1% y 3%”, dijo el funcionario de la Fed.
La productividad mide la eficiencia general de la economía y tiene importancia más allá del banco central. Determina la rapidez con que puede expandirse la economía, cuánto pueden ganar las compañías y cuánto podrán pagarles a sus empleados, así como cuanto puede incrementar su presupuesto el gobierno. Es por eso que los economistas dedican tanto tiempo a tratar de determinarla.
“Es el elemento determinante fundamental del nivel de vida de la población, pese a lo cual sabemos muy poco respecto de cuál es su motor”, dijo Barry Bosworth, investigador de la Brookings Institution en Washington y ex asesor del presidente Jimmy Carter.