Washington (Reuters).- Las ventas de casas unifamiliares nuevas en Estados Unidos subieron inesperadamente en julio y tocaron su nivel más alto en casi nueve años debido a un alza generalizada de la demanda, lo que mejoró el panorama para el mercado inmobiliario.

La fortaleza del mercado inmobiliario puede compensar la debilidad del sector de manufacturas. Otras cifras publicadas el martes mostraron que la producción de las fábricas sigue limitada por débiles pedidos.

“Hay un cuadro optimista que comienza a aparecer en el mercado inmobiliario, apuntando a una sostenida bonanza en el sector, que sigue siendo una de las pocas áreas brillantes de la economía de Estados Unidos”, dijo Millan Mulraine, economista de TD Securities.

El Departamento de Comercio dijo el martes que las ventas de casas nuevas escalaron el mes pasado un 12.4%, a una cifra anual desestacionalizada de 654,000 unidades, el nivel más alto desde octubre del 2007.

El ritmo de ventas de junio fue revisado a la baja a 582,000 unidades, desde las 592,000 unidades reportadas previamente. No obstante, el incremento de julio probablemente exagera la fortaleza del mercado inmobiliario, dado que no ha sido igualado por un fuerte dato de inicios de construcción de viviendas.

Con todo, las ventas subieron un 31.3% interanual. Economistas consultados en un sondeo de Reuters proyectaban que las ventas de casas unifamiliares, que responden por alrededor de un 9.6% de las ventas generales de viviendas, bajaran a una tasa de 580,000 unidades el mes pasado.

El sorpresivo incremento del mes pasado llevó a las ventas de casas nuevas bastante por sobre su promedio del segundo trimestre, lo que apunta a un impulso sostenido en el mercado de viviendas nuevas. La construcción residencial fue un lastre menor para el crecimiento económico del segundo trimestre.

La fortaleza del mercado inmobiliario -marcado por el aumento de los valores de las casas, que está incrementando el patrimonio de los hogares- está contribuyendo a apuntalar al gasto del consumidor, amortiguando el golpe para la economía de una baja en el gasto de las empresas, así como una corrección de los inventarios.

La mejoría de las condiciones del mercado laboral, que están incrementando gradualmente los salarios, así como también tasas hipotecarias cercanas a mínimos históricos, están respaldando a la vivienda.

Las ventas de casas nuevas probablemente se estén beneficiando de una escasez crónica de viviendas usadas disponibles para la venta.

El índice del mercado de la vivienda PHLX, que incluye a constructoras y a empresas de materiales de construcción e hipotecas, subía un 1,0 por ciento, más que el mercado bursátil estadounidense en general.

Otro reporte, de la firma IHS Markit, dijo que su índice de gerentes de compra adelantado bajó a 52.1 en agosto desde un máximo de nueve meses de 52.9 de julio. Una medición sobre 50 muestra una expansión del sector de manufacturas.

Las fábricas reportaron una desaceleración de los pedidos este mes y varias dijeron que clientes habían decidido esperar hasta las elecciones de noviembre.