Austin, Estados Unidos (Reuters).- Michael Dell obtendría hoy la aprobación de los accionistas para su oferta de adquisición de Dell Inc por 25,000 millones de dólares, poniendo fin a meses de conflicto con los inversionistas de la empresa y terminando con la incertidumbre que rodeaba al tercer fabricante de computadoras más grande del mundo.

Dell, quien fundó la compañía en su habitación universitaria en 1984, luchó durante meses para convencer a los escépticos inversores de que su oferta era la mejor opción.

Esta semana logró imponerse luego de que uno de sus más acérrimos adversarios, el inversor activista Carl Icahn, abandonó el conflicto porque dijo que era “imposible de ganar”.

Los accionistas empezaban a depositar sus votos el jueves por la mañana en Austin, Texas, y si el magnate y su socio, Silver Lake, obtienen el visto bueno de los accionistas en la reunión especial como se espera, el ritmo de la transformación debería acelerarse.

Dell y Silver Lake pretenden que la empresa deje de cotizar en bolsa.

La aprobación también tranquilizaría a los clientes, que se han preocupado por la dirección que adoptaría la firma durante una batalla de carácter público que colocaba a grandes actores de Wall Street como Icahn, Southeastern Asset Management y T. Rowe Price contra el presidente ejecutivo.

“Una vez que el acuerdo se haya consumado, pueden seguir adelante y cerrar algunos de los grandes acuerdos de infraestructura en los que han estado trabajando. Pienso que hubo un poco de pausa”, dijo Shannon Cross, analista en Cross Research.

Dell reportó una caída del 72% en sus ganancias trimestrales el mes pasado, reflejando recortes de precios que buscaron apaciguar los nervios de los clientes e impulsar una incursión en el mercado empresarial.

Michael Dell ha argumentado que renovar su compañía y convertirla en un proveedor de servicios informáticos empresariales al modo de IBM es una tarea compleja que puede llevarse a cabo mejor fuera del foco de los mercados públicos.

Queda por ver si Dell puede componer sus carteras de almacenamiento, redes y software para competir con Hewlett Packard Co y otros.

Sin embargo, como el productor de computadoras se contraería de nuevo en el 2013, los inversores dicen que la empresa no tiene muchas opciones.

Algunos analistas creen que podría ser demasiado tarde, ya que una gran parte del mercado corporativo ha sido acaparado por IBM y HP.