El éxito de Entel en el Perú aún está por verse. Los recientes análisis de su situación financiera indican que la operadora chilena aún verá una mejora significativa en sus ingresos en el mediano plazo.
De hecho, esta semana se publicaron sus resultados a septiembre y mostraron una caída interanual de las utilidades de 89.7% en el tercer trimestre; un resultado peor a lo esperado, afectado por la consolidación de sus negocios en Perú.
Ya en julio la calificadora Fitch estimaba que la adquisición de Nextel Perú presionaría el flujo de capital de Entel por las inversiones proyectadas hasta el 2015. Estimó que el gasto de capital (capex) este año sumaría unos US$ 300 millones y US$ 200 millones para el próximo año.
Endeudamiento al alza
De forma similar, la consultora ICR estimó que el endeudamiento de Entel ha seguido en aumento tras su ingreso al Perú. Y proyectó que podría seguir incrementándose por su plan de inversiones orientado al “desarrollo de telecomunicaciones móviles, telecomunicaciones fijas y una parte no menor a Nextel Perú”.
Además, ante los requerimientos de capex de la filial en el país, la compañía podría requerir deuda adicional para financiar su plan de inversiones.
Entonces, ¿cuándo vería Entel una mejora significativa del EBIDTA? Todo indica que no será en el corto plazo. Banchile proyecta que sus operaciones en el Perú se traducirían en un EBITDA mayor a cero recién en la segunda mitad de 2016.