Muchos peruanos, entre ellos un buen número de trabajadores y ejecutivos, estará pendiente de este evento durante 32 días, hasta el último pitazo del partido final en el mítico Estadio Maracaná de Río de Janeiro.
La expectativa de esta afición por el más popular de los deportes crece exponencialmente en los países que estarán representados por su selección, como es el caso de las nueve naciones latinoamericanas que participarán en esta fase final del Mundial.
Los trabajadores y ejecutivos de esos países desde ahora proyectan que sus empresas acoplarán horarios o seguirán las transmisiones por radio o Internet, con la idea de evitar el ausentismo y retrasos en la oficina.
Por ejemplo, un reciente estudio de la compañía de receptores de televisión móvil Telegent Systems señala que México y Brasil son los más fieles a sus seleccionados, con alrededor del 77% de los empleados encuestados que afirman que verán la totalidad de los partidos de sus equipos desde sus celulares y computadoras.
Sin embargo, la misma investigación revela que países que no clasificaron a esta etapa decisiva del Mundial, como India, muestran que un 30% de los directores de empresas permitirá a sus trabajadores seguir el torneo en horarios de oficina.
Telegent Systems menciona que estas mismas empresas, con gran afición pelotera de sus colaboradores, recomiendan que para que “no haya una reducción en la producción de la empresa, lo ideal es poner televisores y ser flexibles frente a este tema”.
Similar caso al de la India ocurre en el Perú, que no participa en esta fase mundialista hace 32 años, pero que tiene una gran proporción de su PEA muy ligada al gusto futbolero, en el que las empresas ya empiezan a tomar medidas para “recibir” a las 32 selecciones clasificadas al vigésimo Mundial de Fútbol.
“Tenemos pantallas ubicadas en todos lados, incluida la cafetería de la empresa, para que los trabajadores tengan la oportunidad de ver los partidos. Cada uno maneja sus tiempos de acuerdo con sus objetivos y resultados laborales. Por ello damos esa flexibilidad“, señala Julia Sobrevilla, gerente de Asuntos Públicos y Comunicación Corporativa de Coca Cola.
Por su parte, Corporación Lindley ha planificado colocar para sus colaboradores una pantalla gigante para la inauguración y primer partido del Mundial, con el fin de apreciar a Neymar (Barcelona) y la solvencia defensiva de David Luiz y Thiago Silva, ambos del PSG francés, por Brasil, y por Croacia a sus estrellas Luca Modric (Real Madrid) e Yván Rakitic (Sevilla).
“Aprovecharemos la influencia del patrocinio de Coca Cola hacia el Mundial. También es una forma de vincular a nuestra gente con la marca. Será una fiesta del fútbol en nuestra empresa”, subraya Carlos Vivar, director de Capital Humano de Corporación Lindley.
Otros estudios realizados por consultoras de América Latina, como Smart Coach y Randstad Chile, mencionan que un evento de esta importancia atrae el interés de todos los colaboradores y de alguna forma afectan los niveles de productividad.
No obstante, las compañías pueden aprovechar esta coyuntura a su favor. Con planificación de las horas de trabajo y, al mismo tiempo, la flexibilización de los horarios para ver los partidos, lo que puede mejorar el clima laboral e incrementar el compromiso con la empresa de los trabajadores.
Estas instancias, sostiene Smart Coach, pueden ser utilizadas para promover la cohesión de los equipos de trabajo, la cercanía con las jefaturas y gerencias, y la conexión con la motivación en el trabajo.
Estas recomendaciones coinciden con lo aplicado en Lima por la empresa Talma, vinculada a servicios portuarios y con 3,000 trabajadores en planilla, que tomó la decisión de colocar pantallas gigantes en sus dos cafeterías principales para vincularse con los 64 partidos que trae Brasil 2014, tanto en la sección de la rampa como en la que se moviliza la carga.
“Nuestra compañía opera las 24 horas del día los siete días de la semana, por lo que hemos dispuesto estas pantallas para los trabajadores que no tienen turno. Asimismo, la liga interna de fútbol de la empresa ha acomodado sus horarios para disfrutar de estos encuentros”, dice Beatriz de Rivera, gerente de Relaciones Institucionales de Talma.