Un curriculum vitae atractivo debe ser claro, concreto y completo. El tiempo del reclutador es muy corto, por lo tanto, si en los primeros 20 segundos un CV no capta su atención, se deja de lado y se pasa a revisar otro, sentenció Augusto Cáceres Rosell, decano de la Facultad de Negocios de la Universidad Privada del Norte (UPN).
Según el especialista, el CV ideal no excede las dos páginas y debe resaltar de manera directa la información de contacto, formación académica, experiencia profesional, logros obtenidos y conocimiento de idiomas extranjeros.
Además, debe presentarse de manera gráfica, destacando también aspectos que contribuyan a que el reclutador se forme una idea de la personalidad del candidato.
El académico consideró que “existen diversos puntos de vista sobre si es recomendable adjuntar una foto en el curriculum vitae. No se descartan los CV que no cuentan con fotografías; sin embargo, colocar una foto demuestra que la persona se acepta como es y denota una buena forma de presentarse ante un posible empleo”.
“Además, es importante que los candidatos hayan desarrollado habilidades blandas en su formación universitaria, que los constituyan en profesionales éticos capaces de brindar soluciones en las organizaciones e impactar de manera positiva en la sociedad”, agregó.
Actualmente las organizaciones buscan profesionales altamente competitivos, con habilidades para el análisis de información y buena capacidad de comunicación oral y escrita. En esa línea, los reclutadores no esperan que los candidatos envíen su CV, sino que buscan a los candidatos idóneos a través de herramientas digitales como el LinkedIn.
“Es una herramienta de búsqueda profesional muy rápida y eficaz que complementa el CV. Tiene la ventaja de estar en línea, con lo cual es constantemente actualizada y permite al reclutador interactuar con diversos perfiles para una posición laboral. No estar presente en LinkedIn representa una desventaja para el candidato”, mencionó Cáceres Rosell.
Es vital tener en consideración el adecuado uso de las redes sociales. Los reclutadores ingresan a las mismas para obtener mayor información y observan qué tipo de publicaciones realiza, recibe y comparte.