La queja más común que Cesar Ulloa, reclutador senior en una empresa de búsqueda de talento con sede en Massachusetts, escucha por parte de los irritados buscadores de empleo es que los reclutadores ignoran sus llamadas telefónicas. Para Ulloa, eso casi siempre puede obedecer a una de estas cinco razones, de acuerdo a información que recoge Fortune.
Hoja de vida sin pulir. “Además de exhibir sus antecedentes, experiencia y formación, su hoja de vida puede poner en evidencia su atención a los detalles e incluso su inteligencia”, dice Ulloa. Él ha visto un montón de CV con faltas de ortografía, errores tipográficos, falta de información o formatos difíciles de seguir.
“Asegúrese de que alguien revise su Hoja de vida y le ofrezca una crítica sobre el formato y el contenido”, sugiere. Aunque suene simple, saltarse este paso le puede costar una reunión con una empresa en la que le gustaría trabajar.
Lagunas en su historial de trabajo. Aunque usted tenga una tremenda experiencia laboral y destacadas habilidades profesionales, un largo periodo fuera del mercado puede reducir las posibilidades de que el reclutador decida colocarlo en lista de candidatos a entrevistar, ya que los responsables de contratación normalmente prefieren postulantes que estén empleados. Pero a veces estar entre puestos de trabajo es inevitable.
Si esa es su situación, Ulloa recomienda conseguir algunos trabajos por contrato, incluyendo proyectos a corto plazo: “Es una manera eficaz de mantenerte en el juego, pulir tus habilidades, y hacer nuevos contactos”, dice. También facilitará el trabajo del reclutador.
Habilidades faltantes. “Muchos empleadores tienen requisitos específicos sobre títulos, habilidades y certificaciones que requieren en las nuevas contrataciones”, señala Ulloa. Sin embargo, puede ocurrir que la información relevante esté enterrada o no sea mencionada en absoluto.
Él insta a los buscadores de empleo a que “estén seguros de que todos sus talentos estén claramente enumerados en su CV. Repita y destaque aquellos conocimientos, destrezas y habilidades que se relacionen particularmente con el puesto al que postula.
Inconsistencias en su formación. Ahora que los gerentes de contratación pueden buscarlo en varios sitios de redes sociales, “la coherencia es fundamental”, dice Ulloa. Si su perfil de LinkedIn muestra diferentes títulos o fechas respecto a su CV, por ejemplo, eso creará recelos en la mente del reclutador, y podría ser una razón por la cual no lo llame”. Asegúrese de que, en cualquier lugar del ciberespacio en que aparezca su nombre, cada detalle anexo a él coincida con su CV.
No hay nada que informar. “Si un reclutador lo llamó y no lo ha hecho después de una conversación inicial, lo mejor es hacer un seguimiento”, afirma Ulloa. Encontrar el candidato más adecuado puede tomar meses, pero los reclutadores casi nunca se olvidan de llamar a un solicitante calificado para darle la gran noticia.
Puede que esa llamada tarde más de lo que quisiera, pero Ulloa aconseja paciencia. Llamar o enviar correos constantemente al reclutador a menudo hace que un candidato por lo demás prometedor sea descartado por ser “excesivamente agresivo”, lo cual puede significar que el reclutador no le llame jamás.