La economía peruana inició el 2016 con un crecimiento importante (3.41%), pero aún por debajo de su potencial de 4% y algunos datos adelantados hacen prever un desempeño parecido en febrero al registrado en el primer mes del año.
El jefe del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), Aníbal Sánchez estimó que el crecimiento de febrero sería similar al de enero o al menos importante, ante un fuerte repunte de la producción de electricidad y una mayor ejecución pública.
“Veremos qué pasa con el resto de actividades, aún no tenemos las cifras pero estos dos datos nos estarían señalando un comportamiento sino similar, importante para el mes de febrero”, comentó Sánchez.
La producción de electricidad creció en febrero 16.26%, su mayor nivel desde marzo de 1998, ante una mayor demanda de energía eléctrica de la actividad minera, manufactura, comercio y servicios, según el ente estadístico.
En tanto, el avance físico de obras creció 14.94%, ante una mayor ejecución de la inversión pública de los gobiernos locales (67.86%), aunque el gobierno regional y nacional aún registran cifras negativas en el segundo mes del año.
Otra dato que augura un mejor resultado en febrero es la producción de cemento. La Asociación de Productores de Cemento (Asocem) reveló que la producción creció 2.9% en el segundo mes del año. El despacho total y el despacho nacional crecieron en ambos casos 2.1%.
Impacto insignificante
Los temores de choques internos también se han diluido. El jefe del ente estadístico aseguró que el Fenómeno del Niño y el proceso electoral no han tenido impacto en el crecimiento de la economía en enero de este año y no se esperan golpes en el corto plazo.
“No creo que afecte, no hemos visto síntomas de esa naturaleza, más bien la actividad económica sigue marcando la pauta de un crecimiento positivo no hay un efecto de otra naturaleza. No hemos visto sobresaltos al menos en este último periodo”, anotó.
Sectores sensibles a los efectos del Fenómeno del Niño se mantuvieron dinámicos en el primer mes del año. La actividad agropecuaria creció 5.55% por la mayor producción del subsector agrícola (7.82%), seguido del subsector pecuario (2.84%).
Asimismo, la producción pesquera subió hasta un 40.36% determinado por la mayor captura de anchoveta para consumo indirecto (harina y aceite de pescado).
Sin embargo, la gran duda sobre la recuperación del crecimiento potencial gira entorno a los sectores vinculados a la demanda interna como manufactura y construcción que mantuvieron su tendencia negativa en enero de este año.