Según el portal Pymex, esta es la lista de los errores imperdonables para quien pretende tener una cuenta bancaria de varios dígitos.
Buscar el conformismo por encima de la libertad. El elemento más peligroso del mundo de las finanzas es el conformismo. Con todo, el enfoque del emprendedor debe estar en la libertad. En otras palabras, no se debe pensar en ser rico sólo para jubilarse y dormirse en los laureles. Lo correcto es hacerlo para poder realizar lo que usted quiera.
No diversificar los negocios. Siempre hemos escuchado que “no se debe poner todos los huevos en la misma canasta”, o lo que es lo mismo, “hay q diversificar”.
Por ejemplo, si su negocio en un rubro artístico quebrara, la desgracia podría ser atenuada por sus negocios en otros sectores. Sin embargo, esa línea de raciocinio podría estar errada por una razón: quien diversifica no se especializa.
Para los especialistas, aquél que quiera volverse rico debe aprender todo lo que pueda acerca de un tipo de negocio y prosperar en él. Reflexione sobre este punto.
Depender sólo de una fuente de ingresos. Vale resaltar que el enfoque en un ámbito de negocios no obliga al emprendedor a tener sólo una fuente de renta. Se recomienda que una parte de los ingresos sea invertida como inmuebles o fondos de inversión.
Cabe mencionar que ello no es necesariamente una diversificación, sino un reforzamiento de los ingresos.
Compararse a otros. Todo el mundo tiene habilidades diferentes. Por ello no se compare con otras personas. No es para nada saludable hacer comparativos extremos como por ejemplo, con las personas que aún son pobres o multimillonarios como Mark Zuckerberg, pues en el primer caso puede llevar al conformismo y el otro a un sentimiento de impotencia. Lo que importa es pensar en sí mismo.
Invertir en tendencias. Lo errado en apostar en negocios “de moda” se explica por medio del propio significado de la palabra “tendencia”: algo que surge y dura poco.
Piense por ejemplo, en los mercados de cupcakes, que enfrentan dificultades, y en el desempeño de emprendedores como Warren Buffet, un hombre que invierte en negocios poco glamorosos, como ferrovías, seguros, refrigerantes y dulces, y al mismo tiempo es dueño de una inmensa fortuna.
Es mejor continuar por un camino lento y con un destino correcto, que subirse a una montaña rusa.
Confiar en personas sin fundamentos. Uno de los errores más comunes en los negocios es creer personas muy convincentes y carismáticas pero sin información suficiente provista como para abrir un negocio.
Los sentimientos por estos contactos deben ser dejados de lado y que las razones y fundamentos que garanticen el éxito deben ser siempre manifestados.
No se fíe tanto en las cuentas de ahorro. No es posible crear riqueza colocando sus ganancias en el ahorro. De acuerdo con ciertos especialistas, esa modalidad de inversión rinde poco y nos motiva a “crear emergencias” para gastar aquello que está depositado en el banco.
Tales emergencias no son tan urgentes después de todo. A decir verdad, son una razón que buscamos para hacer algo que nos encanta: comprar.
Por lo tanto, para garantizar la creación de riqueza, es preferible invertir el dinero en instrumentos le impidan rescatarlo fácilmente. De esa forma es posible ganar mucho más dinero.