Ninguna empresa está exenta de pasar periodos de crisis y un emprendedor debe estar preparado para enfrentar esta situación. Presentamos nueve medidas que pueden ayudar a tomar decisiones adecuadas de darse esta circunstancia.
1. Evaluar el negocio
Los especialistas recomiendan que lo inmediato es revisar qué sectores de la economía se encuentren mayormente afectados por la crisis e identificar si el negocio que se tiene es parte de este riesgo. De tal análisis, uno puede definir si las medidas a tomarse son moderadas o drásticas o, inclusive, si el negocio podría sacar provecho de la crisis.
Para medir qué difícil está la situación, es importante tener un registro de las ganancias obtenidas en años pasados y hacer una comparación con la actualidad para ver si en verdad los ingresos han descendido.
2. Crear mecanismos de diferenciación
La pregunta es la siguiente, ¿cómo lograr que al encontrarnos en una crisis los consumidores escojan tu negocio y no otro? La respuesta: por medio de mecanismos de diferenciación; es decir, crear ciertas formas de distinguir el producto o servicio de la competencia.
Por ejemplo; una pequeña panadería que vende solamente panes se puede incorporar otros productos de calidad que no genere muchos gastos, como pasteles o cafés, que deben ser elementos adicionales de calidad y no muy caros, pues no se debe olvidar que la situación económica está un poco difícil.
3. Valorar reducir el precio
Los especialistas aconsejan que las empresas analicen disminuir el precio de sus productos, sin afectar su calidad. Se trata de reestructurar el servicio o producto en sus costos para que sean más competitivos en el precio. Tomando como ejemplo un pequeño restaurante, se puede ofrecer el mismo menú, pero con menos ingredientes si afectar la calidad y sabor. Es una forma de atraer más clientes.
4. Recortar gastos superfluos
Los primeros gastos que deben ser reducidos son los que no le aportan nada constructivo a la producción, es decir, todos los gastos que no generen ingresos ni ventas adicionales al negocio.
Por ejemplo, una pequeña empresa de confecciones que cuenta con una cartera de clientes fijos o tiene una zona de influencia de donde él genera su producción, ¿por qué tendría que gastar en publicidad?
5. Establecer alianzas con otros negocios
Otra de las recomendaciones es la de establecer alianzas con proveedores y con otras empresas similares. Por ejemplo un restaurante puede crear una sinergia con una de repostería que pueda abastecer al restaurante.
La idea es pensar en cosas que posibiliten que la pequeña y mediana empresa busquen otras áreas de mercado vía alianzas o clientes corporativos para que aumenten sus ventas.
6. Reestructurar la deuda con el banco
Si la empresa tiene muchas deudas y la crisis es tan grave que no se puede pagarlas, el emprendedor podría puede solicitar una restructuración de la deuda para no afectar el flujo financiero de la empresa y pagarse luego a tiempo.
Luego del préstamo del banco para la compra de maquinaria o equipo, si se vislumbra que la economía afectará el negocio, se tiene que hacerse alguna negociación con el banco.
7. Contar con un presupuesto y ahorrar
Muchos aseguran que una crisis puede prevenirse por medio del orden y del ahorro. Por ello los especialistas recomiendan tener una idea de los ingresos y egresos del negocio cada mes y llevar un control de este, para evitar que las empresas sigan trabajando informalmente. Por ello, es fundamental tener muy claro los ingresos y costos.
8. Aprender e innovar constantemente
Los momentos de crisis a veces ofrecen oportunidades para aprender y evolucionar, pero no se necesita estar con el agua hasta el cuello para hacerlo.
Se puede aprender e innovar constantemente. Si no se hace, es muy probable que uno decaiga drásticamente, como en el caso de empresas como Sony y Kodak que en algún momento fueron los líderes en sus industrias. Entonces, en momentos de crisis, uno tiene que elegir entre ser reactivos o ser proactivos.
9. Convierte el problema en una oportunidad
Mayormente las personas tienen una interpretación negativa en un momento de crisis asignándoles adjetivos negativos, tales como “esta situación está muy mal y es injusta”. Hay otra opción válida de interpretar una crisis que es la de relacionarse con ella y verlo como una oportunidad de sobresalir. Henry Ford decía al respecto: “El fracaso es la oportunidad de empezar de nuevo de una forma más inteligente”.