Si tuviéramos que nombrar aspectos de la reforma de las AFP que no se alinean con los intereses de los afiliados, estos serían el haber generado la obligación de hacer una solicitud para permanecer en la comisión por flujo (cobro actual), el impacto de la comisión por saldo en el fondo de pensiones y los aportes de quienes trabajan con recibos por honorarios (independientes).

Trámite innecesario
Así lo explicó Jorge Guillén, docente de la Maestría en Finanzas de ESAN. Para él, uno de los principales errores —e injusticia para los afiliados— es el haber generado un trámite para optar por la comisión por flujo, cuando “generalmente es al revés”: solo debieron hacer una solicitud quienes deseaban migrar a la comisión mixta (que terminará siendo por saldo).

“Parece que hay un afán por pasar por default a la nueva comisión por saldo, que es un perjuicio para el joven”, dijo Guillén. Esta posición también coincidió con la del congresista Luis Galarreta, quien objetó el plazo dado por la SBS para hacer la solicitud. Unos días después, éste se amplió hasta el 31 de mayo.

Fondos vulnerados
El segundo punto sería el mismo esquema de comisión por saldo (denominada mixta en el corto plazo), ya que afectaría no solo al aportante joven, sino al mandato constitucional que establece la intangibilidad de los fondos de pensiones. Guillén apuntó que aún queda pendiente la resolución del Tribunal Constitucional (TC) al respecto.

En agosto del 2012, el TC admitió la demanda de inconstitucionalidad presentada en julio por la bancada fujimorista. Guillén advirtió que la reforma, además de chocar contra el principio que protege los fondos de jubilación, crearía un monopolio, ya que la AFP que gana las licitaciones se queda con los nuevos afiliados automáticamente por tres años.

Captación de independientes
Los trabajadores independientes ahora podrán rentabilizar el ahorro de su jubilación en el SPP. Este es un cambio que en sí mismo no es negativo, pero Guillén asegura que los trabajadores en planilla menores de 40 años tendrán que aportar el 10% del pago que reciban en caso de proveer servicios con recibos por honorarios (cuarta categoría). Y esto también vendrá con las comisiones respectivas.

“Sería como pagar doble”, advirtió. Al menos para este sector de la población, sería como quitarles “ahorro presente para el ahorro futuro”, con lo que el consumo podría verse disminuido, finalizó.