Diana Mujica Maguiña
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Brasil revoluciona 27 grandes aeropuertos con una inversión de US$ 3,861 millones ante el Mundial de Fútbol 2014 y los Juegos Olímpicos (JJ.OO.) del 2016.
El Gobierno tiene un claro objetivo: aumentar un 41% la capacidad de los principales aeródromos del país. Para ello ha privatizado aeropuertos claves de su territorio.
Brasil no quiere desentonar como anfitrión de los dos eventos deportivos más importantes del mundo. Y por ello tiene presupuestos cada vez más estirados y logística que cada vez requiere de más desembolsos.
Seguridad
Para borrar el halo de desamparo que el país puede generar luego de ver las protestas callejeras, y con la intención de quitar todo rastro de país tercermundista, Brasil ha invertido hasta ahora US$ 900 millones en seguridad pública. Parte del esfuerzo es por las críticas de la FIFA, cuyos voceros llegaron a comentar que Brasil estaba más interesado en ganar el Mundial que en prepararlo.
Es por eso que Brasil prevé la inauguración de 422 nuevos hoteles hasta 2016. Además que la inversión en esos establecimiento hasta 2016 sea de US$ 5,275 millones. y que incremente su capacidad hotelera en 70,531 plazas.
Ayuda local
Con cifras como estas, el Gobierno brasileño ha salido en busca de ayuda privada. El director de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, Renato Ciuchini, dijo que su nueva meta es generar entre US$ 1,300 y US$ 1,500 millones. en ingresos de patrocinadores nacionales. Esto duplicaría lo reunido hasta ahora que son US$ 650 millones.
Con un presupuesto para el Mundial del 2014 en US$ 15 mil millones., solo queda esperar que las cuentas cuadren.
CIFRAS Y DATOS
Ingresos. Otras fuentes de ingresos son la venta de boletos, cesión de derechos, venta de productos y una contribución del Comité Olímpico Internacional.
A la espera. Muchos auspiciadores locales quieren ver primero cómo resulta el Mundial 2014 antes de invertir en los Juegos Olímpicos del 2016.
Mundial. Para Brasil 2014 se han logrado patrocinios por US$ 1,600 millones.