Raúl Castro Pereyra
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Valeria Fuertes
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Cuando Pochi Marambio era niño escuchaba los discos de calipso de su padre, quien al igual que él, también fue músico. El reggae lo fue descubriendo de a pocos en los tracks que incluían algunos músicos ingleses en sus discos. Ese género, que llama sensual, siempre le recuerda a su niñez.
A mediados de los setenta se mudó al Cusco, allí los mochileros que llegaban, lo hacían con sus casetes de reggae, y Pochi supo que ese era el ritmo que quería tocar. Pero fue recién en 1988 que lanzó Tierra Sur, la primera banda peruana cuya totalidad de su repertorio estaba entregada a ese ritmo.
¿Se renueva el público de Tierra Sur?
En general el limeño, el peruano, cuando pasa de una edad a otra cambia sus gustos; ya no es rockero, ya no le gusta el reggae y pasa a la salsa o la cumbia. Eso se refleja en que ya no va a los conciertos, pero como una suerte de nostalgia sigue escuchando su música de origen. Ahora va gente nueva, un público más joven a vernos, también por el hecho de que no estamos ni en radio ni en televisión, que de alguna manera es un alivio.
¿Por qué es un alivio?
Porque cuando tuvimos una etapa de más exposición, los promotores querían explotarnos, el público también quería imponernos. Nosotros teníamos una canción como “Llaman a la puerta”, que es la más burlona, y la masa esperaba que así sean todos nuestros temas. Preferimos ahora aceptar que somos una banda para una minoría, un público pequeño, pero fiel.
¿Es consciente de que Tierra Sur es una marca?
Sí los soy, ten en cuenta de que son 28 años en que no hemos parado. Solo uno o dos años tuvimos poca actividad.
Saliendo a tocar
Todos los fines de semana, los nueve integrantes de Tierra Sur tienen un show. El verano es un buena época para la banda; las playas del sur, un buen lugar. Cuando arranque el invierno, los conciertos se reducen a dos por mes, allí entra a tallar El cartel Marambio, la banda que tiene junto a sus hijos. Los ritmos son otros, apunta el músico.
¿Tienen un mánager?
Claro que sí. Es una persona supervaliosa. Muchos grupos no tienen, porque no hay costumbre y hay desconfianza de los artistas y viceversa.
¿Cuánto gana el mánager?
Entre 15% y 20% por show.
¿Hay un mercado de reggae en el Perú?
Hay más bandas. Hay grupos sólidos, que hacen videos, como Laguna Pai, que abren el mercado y eso ayuda a todos. En los últimos años el mercado ha cambiado para mejor, hay más locales, más bandas. Hay un público más consciente que sabe escoger su música, y no deja que se la impongan.
Ustedes no graban desde el 2004, ¿eso les resta vigencia?
No grabamos por la piratería. Hay un disco que fui grabando poco a poco, y lo tuve guardado, porque ya había regalado mucha plata a los piratas. Ese disco lo colgué (hace menos de un año) en una de las vitrinas de música digital. Es un disco que lo hicimos todo en inglés.
¿Es rentable ser músico en el Perú?
Sí tocas música comercial, como la cumbia, sí.
¿Pero si eres Pochi Marambio?
Hay temporadas como el verano donde hay muchos contratos
¿Hay más disposición de los empresarios a pagar más por una banda peruana?
Creo que sí, antes había mucho abuso, porque éramos una de la única banda de reggae que cobraba y hasta ahora en 28 años nunca hemos tocado gratis para un evento comercial.
De músico a un escritor de cuentos para niños
Pochi Marambio tiene un libro. Él lo escribió, él hizo todos los dibujos que allí aparecen, así como la música que se puede descargar para leerlo aún mejor. El líder de Tierra Sur publicó “Waldo, el búho periodista”, un texto para niños, durante la última feria del libro Ricardo Palma.
Meses antes, durante la Feria Internacional del Libro de Lima, habló con Germán Coronado, presidente de la Cámara Peruana del Libro y editor de Peisa.
Días más tarde, y tomando un café, se cerró el acuerdo: de un libro se pasó a una colección de seis. Marambio no para de escribir, tampoco de enseñar, es profesor en la Universidad Católica, tampoco de pintar, incluso piensa hacer una muestra colectiva este año. “Ya estoy curado de las personales”.
“He constatado que a los niños les gusta mis canciones, aunque no sean hechas para ellos necesariamente. El reggae es sencillo, es familiar, no busca chocar”, señala.
¿Qué tan complicado es escribirles a los niños?
No es difícil, como tampoco actuar frente a ellos. Tierra Sur se presenta en parques en conciertos para familias.
DIXIT:
“Estuve 10 años en la Gran Banda de Jean Pierre Magnet (…) Me llamó para este grupo en medio de una recesión terrible en que no había mucho trabajo”.