(Bloomberg).- Una motocicleta enorme y de alta velocidad no es exactamente lo primero que viene a la mente cuando se piensa en David Yurman, joyero de gama alta conocido por sus pulseras de cable trenzado y aretes de perlas oscuras.

Pero cuando se piensa en Evan Yurman, hijo de David y director de la línea para caballeros de la marca, es normal.

Encargó una motocicleta llamada David Yurman Forged Carbon por MV Agusta que saldrá a la venta junto con su nueva colección de joyería para caballeros. La moto cuesta US$ 48,000, y se ofrecerá en una venta especial con Worth Motorcycle Company más adelante este año.

Evan es un fanático de las motocicletas y ha coleccionado distintos modelos, como BMW vintage y Harley-Davidson antiguas por décadas. (Es común encontrarlo en los Hamptons o en su casa en el norte de Nueva York ya sea en motocicleta o en automóvil).

Sabía exactamente a quién recurrir para crear una motocicleta única que inspirara al tiempo que demostraba las propiedades de una pequeña colección de anillos, llaveros, pulseras y mancuernillas: el icónico fabricante Walt Siegl. Este es un artesano que nació en Austria y corredor famoso por fabricar motocicletas hechas a mano y personalizadas en su taller en New Hampshire.

Walt produjo algo bello: una motocicleta de tres cilindros, 800 cc, de cuatro tiempos, 12 válvulas, y motor refrigerado por líquido con 160 caballos de fuerza, una potencia inmensa para una máquina que pesa solo 305 libras (138 kilos). Puede alcanzar más de 180 millas por hora (289 kilómetros por hora).

Una persona que la usó dijo que manejarla en carretera fue una experiencia que le cambió la vida.

Siegl fabricó la motocicleta en Kevlar (poliparafenileno tereftalamida) personalizado, con una horquilla de carbono forjado (el aparato en la parte delantera), así como las salpicaderas delantera y trasera, además de frenos a disco radiales Brembo de alta gama. Todo es hecho a medida; tan solo los moldes cuestan US$ 15,000. De hecho, dijo Yurman, si la motocicleta tuviera un precio adecuado costaría cerca de US$ 250,000.

“No hay ganancia alguna en esto”, dijo. “Walt es un gran modificador de motocicletas y escultor, y me inspiró invitarlo a colaborar”.

Hasta que se venda, Yurman la mantiene en su estudio privado de diseño.

“Solo quería tenerla, eso es todo”, dijo Yurman el otro día, riéndose. De hecho, funcionó a la perfección como una aplicación práctica de su última obsesión: el carbono forjado, explicó.

“Si tomas carbono forjado y lo pones en joyería, es una conversación de una vía. Pero si lo pones en una motocicleta, en algo que puedes usar, se convierte en un diálogo”.