Por Stefano De Marzo
No había persona más idónea para iniciar la apertura de las tiendas Juan Valdez Café en el Perú que Hernán Méndez. El presidente de Procafecol, entidad que representa el negocio del café colombiano, pasó su adolescencia en Lima, pues su padre, quien trabajaba para una multinacional estadounidense, fue destinado al Perú entre 1968 y 1973. “Tuve la fortuna personal de vivir aquí”, comenta Méndez. “Tengo un entrañable cariño por el Perú. Hasta he hecho el Camino Inca en Cuzco”, añade.
Tras haber iniciado su internacionalización por medio de socios en países como Chile y Ecuador, el consorcio cafetalero decidió hace dos años que el siguiente paso era continuar con franquicias. En ese contexto, hubo dos grandes razones para emprender la operación peruana: la afinidad cultural que se siente entre Colombia y el Perú, y el hecho de que este último sea un país con producción de café de calidad, lo que ha llevado al consumidor local a valorar un buen producto. “Lo consideramos un consumidor exigente, que ya tiene un buen paladar para el café”, explica Méndez.
Hace dos meses se abrió el primer local en el Mall Aventura Plaza de Santa Anita. Tras los buenos resultados, se tiene programadas más aperturas en el Centro Cívico, en Plaza Norte, en Piura y en Cusco. “Ya tenemos doce locales cerrados y estamos apuntando a que, a fin de año, sean quince”, indica Méndez. Además, pretenden contar con 30 locales adicionales hasta el 2016, con una inversión total de US$ 10 millones.
Los locales peruanos se sumarán a las más de 200 tiendas de Juan Valdez Café en el mundo. La marca nació hace 12 años, de la mano de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, principal accionista de Procafecol, para mejorar la participación del caficultor en la cadena de valor del café, inclinada crecientemente al negocio de cafeterías como Starbucks. “Antes de eso, nunca nos hubiéramos imaginado que podíamos participar en este negocio”, confiesa Méndez. Y lo más probable es que él tampoco hubiera pensado que regresaría al Perú a impulsar esta agresiva apuesta. Pero está muy contento de hacerlo. “Mis recuerdos del Perú son espectaculares”, afirma.