Aunque no lo crea, la mayoría de los autos de lujo no son McLaren anaranjado o incluso Ferrari rojo. Son “ártico”, o “diamante” o “niebla”; en otras palabras: blanco, plata y gris.

La sensación, según los expertos, es que esos matices son considerados eternos. A la gente le gustan porque lucen sofisticados y elegantes. Por lo menos, son inofensivos.

“Los fabricantes han aprendido qué colores son los más apropiados para sus vehículos”, dice Eric Ibara, director de consultoría de valor residual en Kelley Blue Book. “Si se queda con los tradicionales [colores] blanco, plateado y negro, entonces no le puede ir mal”.

Aburrido, tal vez. Sin embargo, según Kelley Blue Book, el plata sigue siendo el color de elección para los vehículos de lujo. Un tercio de todos los vehículos de lujo son plata; otro 30% de ellos son diamante, cristal, nieve, polvo, crema, o alguna otra versión de blanco.

Y sin importar lo mucho que adora el lado oscuro, si conduce un Aston o BMW negro, va a ser minoría. A pesar de que en general es un color popular para los autos, solo el 8.5% de todos los autos de lujo vendidos el año pasado eran negros.

Perfil de personalidad.
El color de su auto dice mucho sobre los sentimientos que considera importante y cómo se percibe a sí mismo. Las tendencias en los colores de autos operan en un marco de tiempo mucho más largo que lo hacen para la ropa –estas cambian cada seis u ocho años en lugar de cada temporada– pero implican tanta emoción y personalización para aquellos que los eligen como cualquier vestido Dior .

“Se trata de comprar algo que haga una declaración sobre su personalidad”, opina Cathy Bass, una diseñadora senior de Bentley. “Cuando va a comprar un auto nuevo, esto es fundamental”. “El color induce la memoria, e influye su estado de ánimo, sobre todo cuando está conectado a la forma en que expresa su personalidad”, dice Erin Crossley, director de color y diseño de Cadillac.

Las reglas de los colores y cómo se relacionan a la personalidad se basan en sentido común: los colores vivos e intensos como el rojo y amarillo se asocian más a menudo con jóvenes deportistas y conductores llenos de energía, dice Crossley. Los colores dramáticos, como el verde y verde azulado, connotan una “estética de rendimiento”. Los colores neutros y débiles son considerados tranquilos y lujosos.

“Las personas equiparan los colores claros con cosas suaves”, dice Crossley. “Si usted es un amante de la adrenalina, va a elegir rojo”.

Cómo elige la gente.
Bass, quien ha trabajado como experto en color durante 27 años y actualmente conduce el programa de Bentley, dijo que seleccionar el color de un auto es una cuestión de instinto y es algo especialmente delicado cuando la persona que gasta el dinero tiene una pareja.

“Las acompañantes, en particular, desempeñan un papel importante en la selección del interior y el exterior del auto”, dice Bass. “Muchos caballeros dicen que están interesados en el motor y el rendimiento, y ‘dejo que mi esposa elija el color’”.

Pero hay más sobre el color de un auto que solo decirle al mundo que usted es una persona genial o un piloto rápido. El color también afecta el valor. Según un estudio de Kelley Blue Book, si usted está tratando de vender un auto que fue pintado o forrado en un tono ‘poco popular’, por ejemplo, marrón, esto disminuirá el valor residual de su auto por cientos o incluso miles de dólares.

“En pocas palabras, es probable que el color popular de ahora haga a su vehículo más popular para un comprador dentro de cinco años”, dice. “Los colores menos populares deprecian el valor de su vehículo”.

Atracción nostálgica.
Para Ibara de KBB, la tendencia hacia el blanco no cambiará pronto. El blanco comunica atemporalidad y frescura, que son valores positivos. Si usted conduce un auto blanco, es probable que canalice esos valores, dice Ibara.

El verde azulado, por otro lado, estaba a la moda para los conductores en los años 1990 que querían sentirse peculiares o diferentes de la norma. Estos días los colores canela y kona son muy populares (es decir, marrón oscuro y marrón rojizo).

“Son colores que tienen ese equilibrio perfecto de ser expresivos y también esa sensación que recuerda los buenos productos de cuero”, dice Crossley. “Recrea un ambiente hogareño dentro del auto, siendo expresivo sin ser demasiado exagerado”.

Así son los tonos que evocan la nostalgia. Sherwin Williams informa que para el 2016, “la vida multifamiliar está de vuelta, y esta paleta se conecta a través de generaciones: un verde elegante y un rosado atrevido de “buena onda” que es tan resueltamente moderno e igual de vintage de forma conmovedora”. Los tonos se reflejan en los autos.

La relevancia del mercado.
Bass recorre desfiles de moda, ferias de muebles, eventos de diseño y ventas de textiles en busca de matices que reflejen lo que quieren los compradores de Bentley. O más exactamente, lo que ellos quieren, ya que ella trabaja en productos que no saldrán al mercado por tres o cuatro años después de ser iniciados. Las crisis económicas resultaron en apagados colores más grises, según el informe de Sherwin Williams. Los años del repunte se tradujeron en tonos más audaces y brillantes.

La clave para producir un color que gane en cualquier nivel es lograr algo que haga que la gente se sienta como en casa en el interior del vehículo. Debe complementar otros colores que están en la mente de los consumidores, ya sea en sus refrigeradores, sofás o alfombras de baño.

“Los colores lucen anticuados cuando las personas no pueden relacionarlos con los demás productos y cosas en sus vidas”, dice Crossley.