“¿Qué significa ser? ¿Es sinónimo de vivir? ¿O puede uno vivir, y aún así, no ser? ¿Acaso el mero existir le da a uno el derecho de decir que es? Dudo que haya tarea más difícil para el ser humano que aquella de ser lo que uno debe ser, ya que cuántas cosas ha de dejar atrás en esta aventura, cuánta humanidad, cuánta moral, cuántas ideas, cuántos seres queridos. Cuánto de sí mismo debe perecer para que brote de él el hombre soberano, el ser libre. Hamlet no es un hombre soberano, y es ahí donde radica su tragedia”.
Con esta reflexión el actor Fernando Luque se aproxima a su personaje en la adaptación que Roberto Ángeles y Carlos Galiano hacen del clásico de Shakespeare: Hamlet.
La obra presenta una versión ágil y vanguardista de un texto que tiene sus orígenes alrededor del año 1600, pero que resulta absolutamente vigente. La Dinamarca de la época, con sus vicios y corrupción, resulta reconocible en nuestras sociedades, y los cuestionamientos de Hamlet aún dan inicio al viaje hacia la autoconciencia.
Conservando la riqueza del original, esta adaptación plantea una relectura contemporánea del drama, poniendo el énfasis de la reflexión sobre la juventud, la lealtad y la indecisión.
Pero más allá de las consideraciones humanistas, Ángeles y Galiano conjugan bien la dosis de humor, incorporando personajes excéntricos que hacen contrapunto con la profundidad de la historia.
Cabe resaltar además, la elección del elenco, ya que mezclan en escena a actores de amplia trayectoria como Leonardo Torres Vilar, Christian Ysla, Katerina D’Onofrio y Christian Thorsen, junto al talento de jóvenes como Fernando Luque, Ingrid Altamirano, Nicolás Galindo y Manuel Gold, entre otros.
Al conmemorarse los 400 años de la muerte del mayor dramaturgo de la literatura inglesa, resulta acertado tener en escena una obra que reúne lo mejor de su talento.
Datos:
Estreno: 10 de setiembre.
Temporada: De viernes a lunes a las 8:00 p.m.
Lugar: Teatro Británico, Jr. Bellavista 527, Miraflores.