“A los 40” es producto de una labor enorme, afirma Valladares. “Nos ha costado financiarnos con marcas. Nos ha costado entender que el cine peruano necesita conectarse con el público y, a su vez, que es necesario hacer todo una campaña publicitaria y de marketing para que el público pueda enterarse de esto”, agrega.
También señala que les ha costado muchas cosas, pero ninguna de esas cosas las dicen los críticos.
Reconoce que, obviamente, “A los 40” es la ópera prima de Bruno Ascenzo, pero es inconcebible hacer una crítica cinematográfica desde el lado personal del asunto. No hay que valerse de la edad del director (Ascenzo tiene 29 años), lo que hay que analizar es el proyecto.
“Lo que me deprime es pensar que los críticos puedan estar destruyendo algo que nos ha costado hacer a favor del cine peruano en general: un modelo de negocio que se está creando para autofinanciar películas y desarrollarlas a este nivel”, arremete.
Nivel y calidad
La cinta más taquillera del 2012 fue “Los Pitufos”. ¿Qué de cultural o de técnicamente audiovisual tiene esa cinta? No veo una crítica al respecto, insiste Valladares.
Del 2012 para atrás, las películas que se llevaban todo el dinero de la taquilla eran producciones de Hollywood o de grandes blockbuster, entonces por qué no aplaudir que cintas peruanas como Asu Mare en el 2013 y “A los 40” en el 2014 estén revirtiendo eso y ganándole a enormes blockbuster, reflexiona el productor de ambos filmes.
“¿Por qué no valorar eso? Cintas como Harry Potter nacen con fines de entretenimiento y en base a eso se hacen campañas increíbles. “A los 40” ya superó el millón de espectadores y, para mí, eso ya significa un objetivo increíble”, insiste.