North Bayshore, un vecindario de Mountain View (California) se está convirtiendo en ciudad empresarial por antonomasia. El área acoge a Alphabet, matriz de Google, que emplea a 20,000 personas a nivel local y que el mes pasado anunció planes para gastar US$ 30 millones en la construcción de 300 casas modulares. Según Ty Sheppard, responsable de comunicación, las unidades serán “viviendas a corto plazo para empleados de Google”.
Una operación ilustra las ambiciones de la compañía en la zona: una superficie de unas 200 hectáreas de costa. Pues en el 2015 Google compitió con LinkedIn por los derechos sobre unos 186,000 m2 del escaso suelo de North Bayshore.
Ambas compañías hicieron promesas para conseguir la aprobación de las autoridades locales: medidas medioambientales e incluso becas para la universidad. Finalmente, una permuta de propiedades dio a Google la posesión de la práctica totalidad de North Bayshore.
De poseer cerca de una cuarta parte del espacio de oficinas en la zona hace una década, Google se ha expandido mediante diversas operaciones.
Existe división de opiniones sobre el crecimiento de Google. Un residente de Mountain View desde hace más de 40 años dice que la ciudad “está orgullosa de alojar una de las empresas más innovadoras y revolucionarias del planeta; pero muchos nos vemos perjudicados por los alquileres y los impuestos que están aumentando a medida que los precios se disparan”. Otro señala que las casas que se venden por US$ 1 millón “son bungalós viejos y pequeños”.
Consecuencias de la demanda
En los últimos cinco años, el alquiler medio en Mountain View ha subido de US$ 2,970 a US$ 4,038 al mes. En el mismo periodo, el valor medio de una vivienda prácticamente se ha duplicado, de US$ 812,000 a US$ 1.53 millones (ver en corto).
El repunte de los precios refleja la creciente demanda. Según una agencia inmobiliaria local, hay una vivienda por cada tres trabajadores.
Pilar Lorenzana, vicedirectora del grupo, asegura que el porcentaje crece: “En el 2015 creamos 43,000 nuevos trabajos y 5,000 nuevas casas”.
Google no es la única compañía que trata de combatir la escasez de vivienda en Silicon Valley.
En Menlo Park, Facebook planea construir 1,500 casas en Willow Campus, que estarán disponibles al público, y un 15% de ellas por debajo del precio de mercado. En el 2016, la compañía prometió destinar US$ 18.5 millones para la construcción de viviendas de bajo coste.
Según Lorenzana, “Facebook quiere ser un ciudadano corporativo responsable, y evitar que los trabajadores se vayan”. Pero hay otro argumento para que Facebook y Google construyan casas en la zona: si el coste de la vivienda se hace insostenible, los empleados tendrán que marcharse o pedir un aumento de salario.
A la vez que desarrolla sus propias unidades, Google está trabajando para construir 9,850 casas en North Bayshore que estarán disponibles en el mercado. Lorenzana explica que esta colaboración público-privada es una solución para la escasez de vivienda.