(Bloomberg) Cuando el mes pasado su querido Real Madrid eliminó al poseedor del trofeo Bayern Munich llegando a la final de la Champions League , José Castillo empezó a moverse buscando reservar su viaje para el partido principal del fútbol de los clubes europeos.
Parecía fácil: el encuentro el 24 de mayo contra el rival local Atlético Madrid se jugará en Lisboa, a menos de seis horas de viaje en auto. Sin embargo, con precios de hotel promedio que se encaminan hacia 1,500 euros (US$2,064) por la noche de la final, se vio obligado a abandonar su plan y mirará en cambio el partido por televisión en su casa en España.
“Es un robo”, dijo Castillo, de 34 años. “Es una vergüenza porque, en definitiva, afecta la reputación de Lisboa”.
La primera final en la historia de la Champions League entre dos equipos de la misma ciudad corre el riesgo de ser una decepción para los simpatizantes que no pueden pagar alojamiento en la capital portuguesa, que el año pasado figuraba en las guías de viaje Lonely Planet como uno de sus destinos europeos con precios más razonables.
Los hoteleros de Lisboa están cobrando precios cuatro veces más altos que los de Londres cuando la capital fue sede del mismo evento el año pasado, según datos recopilados por el sitio Web de búsqueda de hoteles Trivago.
El aumento vertiginoso de los precios amenaza la fama mucho menor de apertura a los turistas que tiene la ciudad, dijo Simonetta Afonso, miembro de la Asamblea Municipal de Lisboa para el Partido Socialista.
“Estamos creando una imagen terrible de nuestro país y de la ciudad de Lisboa”, dijo Afonso en una entrevista. “Estos precios son pura especulación y ponen en peligro a nuestro sector turístico, la gallina que pone los huevos de oro”.
Se aprovechan
El turismo representa más del 10% del PBI de Portugal, según el Ministerio de Economía . La final de la Champions League es la primera que se organiza en Lisboa desde 1967, cuando la competencia se conocía como Copa Europea y fue ganada por el equipo Celtic de Glasgow. Tendrá lugar una semana después de la salida del país del plan de rescate internacional el 17 de mayo.
“Los que definen o juzgan que un precio es demasiado alto son los turistas y no el secretario de Estado del área de turismo”, dijo en una respuesta a un cuestionario por correo electrónico Adolfo Mesquita Nuñes, que ocupa ese cargo en el gobierno portugués.
Los precios de los hoteles para la noche del partido en el Estadio Benfica subieron más de 13 veces con respecto al mes anterior hasta un promedio de 1,428 euros, según Trivago.
Un hotel tres estrellas cerca del centro de la ciudad cuesta 5,000 euros, en comparación con el equivalente de 328 euros en Londres, que tiene el doble de hoteles que Lisboa. Cuando el año pasado se jugó la final en el Estadio Wembley de Londres, la noche costaba un promedio de 281 libras (344 euros), muestran cifras de Trivago.
“Lisboa simplemente no tiene suficientes habitaciones para responder a una demanda tan grande de turistas y algunos hoteles se aprovechan”, dijo Ivo Borges, portavoz de Trivago en Lisboa. “Estos precios son probablemente los más altos de Europa en este momento”.
El Concejo Municipal de Lisboa está llevando a cabo una campaña publicitaria en Madrid, que a 630 kilómetros (390 millas) de distancia es la capital europea más cercana, para convencer a los turistas españoles de que prolonguen su estadía más allá del día del partido de fútbol.
Henrique Almeida
