(Bloomberg).- Ha pasado un año desde el escándalo de corrupción generalizado que afectó a las esferas más altas del fútbol mundial, y tanto la reputación como las finanzas de la FIFA aún se encuentran bajo una nube.
No obstante, a unos 250 kilómetros de distancia, el pronóstico es muy distinto para la UEFA, el organismo más importante del fútbol europeo bajo el amparo de la FIFA.
La nueva edición de la Eurocopa 2016 en Francia será la más grande en la historia del torneo, con más equipos, más encuentros y más ciudades anfitrionas. Para la UEFA, todo eso suma más dinero.
La organización espera ingresos por valor de US$ 2,000 millones de euros (US$ 2,200 millones), frente a los 1,400 millones de euros que obtuvo hace 4 años atrás cuando Polonia y Ucrania fueron los anfitriones de 16 equipos.
Durante mucho tiempo solo la Copa Mundial ha superado en ingresos y en popularidad al Campeonato Europeo. Ahora, como son 24 los equipos que participan en el torneo, hay más entradas para vender y se han recaudado aproximadamente 1,050 millones de euros a través de la venta de los derechos televisivos, un aumento del 25% frente a los ingresos que consiguió el torneo en 2012.
Los patrocinios han crecido en un 40%, a cerca de 450 millones de euros, según Guy-Laurent Epstein, director de marketing de la UEFA para el organismo del fútbol. El resto proviene de la venta de entradas.
Detrás de los miles de millones de euros en ingresos por concepto de emisiones televisivas existe una audiencia de 130 millones de personas para los encuentros preliminares, dijo Epstein en una entrevista horas antes de la final de la Champions League, el otro evento de la UEFA que reporta grandes beneficios a través de la venta de entradas.
La audiencia crecerá a 300 millones para la final de la Eurocopa que se disputará el 10 de julio en el Stade de France en París. En cambio, el Super Bowl 50 atrajo 110 millones de espectadores en febrero. “El próximo mes tendremos el equivalente a 51 Super Bowls”, agregó Epstein.
El resto de los ingresos de la Eurocopa 2016 provendrá de la venta de 2.5 millones de entradas, un millón más que las que estaban disponibles en 2012. Epstein dijo que la UEFA espera vender la capacidad total, pese a que ha dado acceso al público a algunas de las entradas que se habían apartado para las empresas que entretienen a sus clientes.