Tallahassee, Florida, Estados Unidos (AP).- Una mujer de Florida de 84 años que compró su boleto de la lotería Powerball después de que otro cliente la dejó pasar en la fila se presentó el miércoles para reclamar el premio mayor de 590 millones de dólares, lo que la convierte en el mayor ganador de lotería en la historia de Estados Unidos.
Gloria C. Mackenzie, de la ciudad de Zephyrhills —donde el billete ganador fue vendido el 18 de mayo_, recibió un solo pago de poco más de 370 millones de dólares, dijeron funcionarios de la Lotería de Florida. Después de pagar el 25% de impuestos federales sobre la renta, Mackenzie se llevará a casa alrededor de 270 millones, dijeron las autoridades.
La ganadora no habló ante una multitud de periodistas que la esperaban frente a la sede de lotería, y se alejó rápidamente en un Ford Focus plateado con su hijo, Scott Mackenzie, y amigos de la familia. Estuvo acompañada por dos abogados no identificados, que se fueron en otro coche.
MacKenzie compró el billete ganador en un supermercado de la cadena Publix en Zephyrhills, una ciudad de unos 13,300 habitantes situada 48 kilómetros (30 millas) al noreste de Tampa, conocida por el agua embotellada de manantial que lleva su nombre y ahora por uno de los mayores ganadores de lotería de todos los tiempos.
En un comunicado leído por funcionarios de la lotería, Mackenzie dijo que compró el billete luego de que otro comprador “tuvo la amabilidad de dejarme pasar en la fila para comprar el boleto ganador”. Mackenzie jugó con un billete de rápida selección, en el que los números son generados aleatoriamente por computadoras de la lotería. Ella dijo que también adquirió otros cuatro boletos para el mismo sorteo.
“Estamos muy agradecidos con esta bendición de ganar el premio mayor de la Lotería Powerball de Florida. Agradecemos el interés del público, el estado de Florida y la lotería”, dijo en el comunicado. “Esperamos que todos nos den la oportunidad de mantener nuestra privacidad por el bien de nuestra familia”.
El ganador tiene 60 días a partir del sorteo del 18 de mayo para reclamar la suma total. David Bishop, portavoz de la lotería, dijo que Mackenzie, sus abogados y asesores financieros estaban muy preparados cuando llegaron, y les tomó cerca de dos horas pasar por el papeleo necesario.
“Claramente se habían estado preparando para esto. Tomaron todo este tiempo para poner todo en orden”, dijo Bishop.
Minutos después del anuncio, una decena de periodistas en Zephyrhills estaban acampados afuera del modesto dúplex gris de Mackenzie, que está detrás de un callejón sin pavimentar y frente a un pastizal para vacas.
Los vecinos se mostraron sorprendidos y dijeron que Mackenzie nunca mencionó su gran victoria.