Si por tradición creemos que las personas que más tienden a llegar tarde son las mujeres, un sondeo realizado por la agencia de turismo y entretenimiento online, Atrápalo.pe, ha puesto en tela de juicio este enunciado, pues reveló que aunque las féminas lleguen tarde en más ocasiones que lo hombres, los último demoran mayor cantidad de tiempo.
Para la psicóloga Mary Castro el llegar tarde o “llegatardismo”, como lo define Atrápalo.pe en su reciente campaña de marketing, es un patrón de conducta que se presenta en todos los limeños en diferentes grados, pero que cualquiera sea el caso, siempre origina problemas sociales, personales y/o profesionales. La principal razón sería la desidia para organizarnos o planificar mejor nuestro tiempo.
Según el sondeo, si bien las mujeres reconocieron ser mayoría (20% ) en llegar tarde a todas sus reuniones los hombres no se quedaron atrás en este problema pues el 13% de ellos reconoció lo mismo, y casi la mitad de ellos (49%) reconoció llegar hasta seis de diez reuniones tarde, contra el 42% de las mujeres encuestadas.
Pero si se evalúa el tiempo perdido en llegar a las citas los hombres le ganan a las mujeres por 7 puntos porcentuales, ya que el 30% de ellos reconoce tardar hasta una hora para atender a sus reuniones, contra un 23% de mujeres que reconoce lo mismo.
Más de la mitad de las encuestadas (61%) indicó además que llega tarde por lo general hasta 15 minutos después de la hora pactada.
Soluciones al problema
Castro asegura que cambiar este hábito de llegar tarde no es imposible: “El lóbulo frontal del cerebro es la parte que comanda la concentración en nuestras actividades diarias y por lo tanto nuestra efectividad en llegar temprano.
El intento diario de planificar y organizarnos es un ejercicio de focalización que fortalece esta parte del cerebro; rehusarse a realizar este simple ejercicio sólo prolongaría el problema de llegar tarde y la inefectividad en cualquier actividad que requiera concentración” puntualiza la especialista.