Mario Vargas Llosa presentó en España su última novela: “Cinco esquinas”. En la Casa de América de Madrid, el Nobel respondió de todo a los periodistas.
Sobre periodismo
“La prensa amarilla ha existido siempre, pero en nuestra época esta ha adquirido un protagonismo que nunca tuvo antes”.
“Me apena mucho la deriva que el periodismo ha llegado a tener en nuestro tiempo. En muchos casos, se ha convertido en una forma de entretenimiento que no tiene límites, que rompe todas las prevenciones y utiliza el escándalo, la basura humana para llegar a un público que, por desgracia, es creciente y ávido de ese tipo de material”.
“Antes se podía decir que había un periodismo tercermundista muy diferente al del primer mundo, pero ahora eso no es verdad. Hoy en día los países más civilizados y los más primitivos tienen un periodismo, aparte del serio y responsable, que es como una gangrena”.
Sobre Trump
“Estados Unidos es un país muy importante para tener en la Casa Blanca a un payaso, a un demagogo y a un racista como el señor Donald Trump ”.
Sobre Barrios Altos
“El nombre Cinco esquinas tiene una cierta connotación simbólica que de alguna manera ha seguido esos vaivenes, esos contrastes tan profundos de los que está hecha la historia del Perú. Periodos de apogeo, de decadencia, de sosiego, de encono y de violencia”.
Sobre el sexo
“Las transpiraciones naturales de esa atmósfera que se vivía por la tremenda violencia que vivía el Perú, por la coerción que ejercían sobre la vida de las gentes el terrorismo, los toques de queda, los apagones, la inseguridad reinante, de alguna manera eran para algunos un incentivo sexual. Y el sexo aparecía como una tabla de salvación, como una manera de buscar la libertad, una seguridad y un goce que el resto de la vida había abolido”.
Sobre Hola
“Si yo pudiera elegir, no aparecería en Hola. A mí me gustaría aparecer sobre todo en las revistas literarias”.
Sobre literatura
“Nunca he sentido la alegría, ni siquiera cuando me llamaron de Estocolmo para darme el Nobel, que sentí esa noche pensando en que podía entrar a La Pléyade. Mucha más alegría que salir en las portadas de Hola, se los puedo asegurar”.