Han pasado ocho años desde que Luis Fonsi lideró el ranking Hot Latins Songs de Billboard con “Aquí estoy yo”. Hoy, junto a Daddy Yankee, repite el logro con “Despacito”, que suma más de 377 millones de reproducciones en YouTube desde su lanzamiento, el 12 de enero.
Esta es, además, la cuarta canción más escuchada en Spotify, donde ya ha recaudado más de US$ 600,000.
Como Luis Fonsi, otros artistas latinos vienen multiplicado cifras gracias a las colaboraciones con otras estrellas. Se trata de una poderosa estrategia de marketing que favorece a ambas partes.
Algunas de las más sonadas son, por un lado, la dupla conformada por Maluma y Shakira con “Chantaje”; y por el otro, Ricky Martin, también con el colombiano de 23 años con el tema “Vente pa’ ca”. Maluma, así, cuenta con unas cinco colaboraciones con artistas renombrados que se ubican entre las canciones más escuchadas en Latinoamérica, según Monitor Latino.
Contratos discretos
Los tratos en las colaboraciones son subjetivos, secretos y negociables, de acuerdo a Alexander Montoya, director general de Milenial Music Group. La opciones son infinitas y todo depende de los contratos con las disqueras.
“Hay muchos tipos de derechos en la música que se pueden compartir, pero los gastos de la grabación del tema y el video suelen cubrirlos quien pide la colaboración (salvo que la iniciativa sea del sello discográfico)”.
Además, normalmente, el artista invitado no recibe un pago por parte del autor, ya que el propósito es una estrategia de promoción. Pero una vez estrenada la canción, los ingresos se dividen.
Iván Cock, productor audiovisual, recuerda que al realizar las coordinaciones, con abogados de por medio, se determinan porcentajes, aparte de las utilidades de ingresos en plataformas de streaming o en los sellos discrográficos. “Todo va en un contrato de colaboración”.
Incluso, explica que entre las negociaciones, el autor de la canción suele aprobar que el artista invitado cante el tema grabado en conjunto en sus conciertos individuales.
Estrategia en pared
Sergio Chinen, exbaterista de Inyectores y productor musical, también recuerda que, en Latinoamérica, las colaboraciones musicales se han establecido en el género urbano, especialmente.
“El autor del tema suele buscar romper el rubro e ingresar a un nuevo mercado junto a un cantante que ya lo domine. Este público es diferente y el invitado ayudará a que se haga conocido”.
Fue el caso de Luis Fonsi, quien buscó saltar del pop latino a la música urbana con Daddy Yankee.
“Fonsi es un artista consolidado que no estaba vigente. Seguramente ahora continuará haciendo su música, pero esta propuesta en colaboración le garantizará parte del éxito”, indica Montoya.
De esta manera, el autor del tema puede catapultarse a un nuevo mercado y, con ello, multiplicar los precios de los tickets de sus próximos conciertos.
