Al acercarse el nuevo año, muchas personas elaboran una lista de cosas que planean hacer para que el 2015 sea grandioso. Sin embargo, a pesar de las grandes expectativas y buenas intenciones, la mayoría de la gente no logra convertir sus promesas de Año Nuevo en realidad.
Las estadísticas sobre las posibilidades de lograr un cambio son bastante escasas. Diversos estudios muestran que las promesas para el nuevo año comienzan a perder fuerza luego de una semana y solo un 40% de los que se fijaron metas alcanzan sus objetivos. Si usted ha tenido dificultades para seguir adelante con sus propósitos, propóngase a hacer diferente este 2015.
Sin importar cuáles sean sus metas, el portal de la revista Forbes anota estas cuatro recomendaciones para alcanzar sus objetivos el próximo año:
1. Identifique su disposición al cambio.
A veces, la presión por fijarse metas para el nuevo año lleva a las personas a hacer promesas con las que no están 100% comprometidas. A pesar de que pueden sentirse motivados en un inicio, en realidad no han pensado en todo el trabajo que conlleva sus propósitos. Pensar en que “debería tener una vida más sana el próximo año”, sin comprometerse a comer sano y hacer ejercicios probablemente no es un buen augurio.
Generar un cambio requiere un proceso. Decidir reformar su comportamiento basado en una fecha del calendario y sin estar realmente listo, solo lo llevará al fracaso.
No hay ninguna razón por apresurarse a hacer algo desde el 1 de enero. Por ejemplo, en vez de decir “voy a dejar de fumar de golpe a la medianoche”, una promesa más razonable sería: “voy a pasar el mes de enero analizando mis opciones para dejar de fumar”. Esto puede aumentar su motivación para dejar de fumar y también le dará tiempo para crear un plan que usted esté preparado a seguir.
2. Confíe en que puede hacerlo.
Mucha gente trata de crear un cambio, a pesar de una persistente voz en su cabeza que dice: “Esto no va a funcionar”. Si sus pensamientos constantemente lo retrasan y mortifican, sus posibilidades de éxito se verán muy disminuidas. Es probable que decida abandonar todo tan pronto como las cosas se compliquen. La creación de un cambio duradero requiere confianza.
Si tiene dudas sobre sus proyectos, anote toda la evidencia que sugiere que usted será capaz de alcanzar sus metas. Lea la lista a diario para afirmar sus fortalezas y reducir sus pensamientos negativos. Aprenda a reconocer y reemplazar los pensamientos irracionales con monólogos más productivos y útiles.
3. Piense constructivamente sobre los contratiempos.
Casi todos los cambios de comportamiento involucran al menos uno o dos reveses. Ya sea que se trate de fumar un cigarrillo o saltarse un par de sesiones de entrenamiento en el gimnasio, la mayoría de las personas reinciden ocasionalmente. Sin embargo, la forma en que responde a esos contratiempos, es lo que determina la probabilidad de alcanzar sus metas.
Si se convence que usted es un completo fracaso después de cometer un error, es probable que le diga a adiós a su promesa de Año Nuevo. A veces, la gente asume erróneamente que el éxito es todo o nada –“Si me equivoco una vez, es un fracaso”. Sin embargo, si usted anticipa los contratiempos y solo los ve como algo temporal, aumentará sus posibilidades de aprender con éxito de sus errores.
4. Construya su fortaleza mental
Para muchas personas, las promesas de Año Nuevo se centran en cambios tangibles, como perder peso, pagar una deuda o dejar de fumar. Aunque los objetivos tangibles y mensurables son importantes, es imposible alcanzar esos objetivos sin fortaleza mental.
Generar una fortaleza mental le ayudará a alcanzar cualquier meta; pues al igual que la fortaleza física requiere constante ejercicio, también lo necesita la fortaleza mental. Concéntrese en las estrategias que le ayudarán a mantenerse en el camino de sus objetivos y vea al 2015 como la oportunidad de crear un nuevo yo.