Diario Expansión de España
Red Iberoamericana de Prensa Economica (RIPE)
La corbata ha entrado de nuevo con fuerza en el armario masculino no sólo para vestir de traje, sino como un accesorio de ‘sport’ cada vez más joven. Su elección marca la diferencia, sobre todo para estas épocas de fiesta. Pero recuerde que para darles un estilo más elegante y sofisticado, el secreto está en el nudo.
De seda negra para un toque de elegancia y misterio, a rayas para un ‘look’ profesional, delgada para un estilo más actual… La elección de la corbata define por completo la suerte que llevará ese día y cómo lo verán los demás.
En sus inicios, la corbata fue un complemento utilizado por los soldados franceses bajo el reinado de Luis XIII con el fin de resguardarse del frío. Fue cuando el rey de Francia reclutó a soldados croatas, los cuales lucían un peculiar pañuelo anudado alrededor del cuello. De hecho, se menciona que el nombre de «corbata» ha llegado a nuestros días fruto de una deformación de la palabra croata.
*Corbatas, las reinas de la fiesta *
Pero la corbata como hoy se la conoce fue diseñada por el neoyorquino Jesse Langsdorf en 1924 como un símbolo de distinción entre caballeros que poco a poco fue democratizándose, convirtiéndose en un accesorio esencial capaz de expresar la individualidad de cada uno.
Durante un tiempo cuestionada, la corbata ha sabido reinventarse, desafiando a las modas, y ha vuelto otra vez al armario masculino para marcar la pauta y con un público cada vez más joven. Para las ocasiones más formales, para ir a trabajar o incluso con un ‘look’ más casual. Los diseños son tan variados como las ocasiones y sus protagonistas.
A la hora de elegirlas, sin embargo, es preciso tener en cuenta una serie de aspectos. Desde la longitud, que nunca debe traspasar el cierre del cinturón; a la medida, entre 8,5 y 9,5 centímetros en la parte más ancha para las tradicionales, aunque ahora se vuelven más estrechas (de no más de 8 centímetros) para un estilo refinado a la vez que sobrio.
En cuanto al tejido, tan importante como el color o el estampado, cada ocasión requiere un material específico, dejando los más delicados como la seda para las veladas más especiales.
Recuerde que la corbata refleja su propia personalidad, y dependiendo del tejido debe elegir también el nudo, un rito que puede adoptar muchas variantes y que requiere de tanta maña como práctica. Los más comunes son el nudo americano, que es el más sencillo; el medio Windsor o español, y el nudo doble o Windsor, el más elegante. Descubra en este vídeo como realizar cada uno de ellos y no olvide que, como dijo Óscar Wilde, “una corbata bien anudada es el primer paso serio en la vida de un hombre”.