La segunda vez no funciona. En Lima los conciertos del mismo artista que viene con otro álbum bajo el brazo no logran los aforos del debut en el escenario. Aunque hay algunas excepciones, nombres que fueron taquillazos y récord de asistencia en su primera visita no superaron las expectativas cuando repitieron plato.

Eso ha hecho que muchos grupos queden vetados, sobre todo al nivel de eventos que en su primera ronda lograron entre 35 mil y 10 mil espectadores.

Sin embargo, la productora Plastilina Récords ha optado por apostar por artistas de nicho, orientados a un público de nicho que es muy fiel a sus artistas y compra cada disco nuevo y asiste a la consecuente gira. Por supuesto no se trata de taquilla masiva.

“Los conciertos que organizamos son dirigidos a un público distinto que está muy interesado en la música independiente y en su relación con otras disciplinas artísticas y culturales, así que tienen un aforo de mil personas”, detalla Jal Nuñez del Prado, director general de la productora.

Pero ¿es sostenible un evento de esta naturaleza? Nuñez del Prado dice que sí porque se negocia con los managers en función del aforo y las expectativas de venta, lo que reduce el riesgo.

Sobre la llegada del modelo de negocio a provincias, Nuñez del Prado asegura que, debido a que el público que sigue a los grupos que trae son exigentes con temas como el sonido, no ha podido hacer eventos fuera de Lima pues no hay locales y condiciones técnicas con buen estándar. “Tendría que llevar equipo desde Lima y eso hace demasiado caro el evento y lo vuelve inviable”.

Artistas.
Este jueves, Plastilina Récords presenta el concierto de Christina Rosenvinge, cantante que fue muy popular en Perú en los años noventa, pero que ha continuado con una larga carrera que sus seguidores más fieles han seguido. De hecho, la artista española llega con nuevo disco bajo el brazo, Lo Nuestro, lanzado este año y que se une a los otros ocho discos como solista, además de múltiples colaboraciones.

Las entradas para ver a Rosenvinge se han agotado para la zona VIP. “Si un artista que tuvo un disco o un hit hace años sigue viniendo, el público sabe que oirá lo mismo, en cambio los artistas que traemos vienen con material nuevo lo que despierta el interés por volver a verlos”, precisa el vocero de la empresa.

La productora, que también funciona como sello discográfico ha traído a Lima a grupos como Los Planetas, Alpaca Sports y Silver Spring, todos de corte independiente y con convocatorias que se mueven en el margen de las mil personas y realizará dos conciertos más en lo que queda del año con las bandas CocoRosie, el 2 de octubre y Wild Nothing el 12 de noviembre.