Proveniente de la comarca catalana del Penedés, un valle verdoso cercano a Barcelona, el cava se descorcha cada vez más. Y es que hoy el vino espumoso ya disfruta las consecuencias del proceso de expansión internacional que sus productores iniciaron hace 30 años.
Así, el cava español promete ganarle terreno al champán francés. Al cierre del año anterior se vendieron cerca de 154 millones de botellas en el mundo, 10 millones más que su rival galo. Eso supone un enorme avance respecto a 1980, cuando se vendían 10 millones de unidades al exterior.
La conquista, no obstante, se ha dado a través del cava estándar. Por eso, hoy el propósito está en deleitar a más paladares con cava reserva y gran reserva, así los productores ya están enfocados en una “segunda conquista”.
Más allá de la crisis
Si bien la crisis puso sobre las cuerdas a distintos sectores de la economía española, los viticultores catalanes decidieron consolidar aún más el cava a nivel internacional para enfrentar la inminente caída del consumo interno.
Eso causó también que la bebida pueda ganarle la partida al champán francés. A ello se le suma otro plus: el cava es un producto que, si bien ostenta una imagen elitista y glamurosa, no es caro. Un factor adicional propicia su auge: hoy este vino ya se está recuperando en el mercado español: las ventas crecieron 7.54%.
Con todo ello, el cava es líder mundial en exportación de vino espumoso teniendo entre sus destinos estrella al mercado alemán, belga, británico y francés, a donde los envíos crecieron 16.3%.
Nuevo foco
Queda además otro trecho por recorrer. Los cavistas lo saben: el producto debe seducir a los menores de 40 años. Y para lograrlo ya ensayan técnicas para ofrecer un vino adaptado al paladar de ese público: más dulces.
Queremos “mostrar que el cava puede también disfrutarse en las noches”, declaró Pere Bonet, presidente del Consejo Regulador del Cava, al diario El País. Por eso, la idea es que las bodegas participen en actividades culturales y festivales para deleitar a los más jóvenes. Una iniciativa interesante fue el Cava Night que se celebró en Barcelona.
No cabe duda: el cava ya ostenta un terreno y amenaza con no cedérselo al otrora líder.
Presencia mundial
El cava sigue siendo uno de los productos más internacionalizados. Al primer trimestre del año, el 36.1% del consumo se concentraba en España y el 46% se exportaba a otros países de la Unión Europea.