Analistas de investigación de la compañía financiera estadounidense Morgan Stanley se han convertido rápidamente en la opción más económica, algo que ni la política puede obstaculizar.
Según el informe, para el año 2020 la energía renovable será la forma más barata de generación de energía a nivel mundial, con la excepción de unos pocos países del sudeste asiático.
“Según nuestros pronósticos, será la economía favorable de las energías renovables y no las políticas gubernamentales lo que impulsará los cambios en los niveles de emisiones de carbono de los servicios públicos”, dicen los investigadores.
Por ejemplo, aseguran que incluso aunque el presidente estadounidense Donald Trump retire a su país del acuerdo climático de París, aún así Estados Unidos superaría los objetivos de dicho tratado, con una reducción de entre el 26 y el 28% de sus emisiones de carbono para el año 2020.
El precio de los paneles solares ha caído en un 50% a nivel mundial entre 2016 y 2017. De la misma manera, la energía eólica en países con condiciones de viento favorable tiene un costo de la mitad o un tercio del de centrales de carbón o gas natural.
Incluso países como Australia, donde la política climática no favorece a las energías renovables, Morgan Stanley espera que, para el 2020, éstas proporcionen un 28% de la energía suministrada.
Diario El Observador de Uruguay
Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE)