Samsung ha presentado el Galaxy J, el teléfono inteligente de otra nueva gama, que le seguiría los pasos a Nokia e incluso Apple, en cuanto a la variedad de colores disponibles. Y es que el terminal vendrá en tonos rosa, azul y blanco.

Por su parte, la filandesa parece haber comenzado una tendencia al hacer que su buque insignia y sus teléfonos Lumia, de gama media, estuvieran disponibles en varios colores brillantes; la manzana siguió la iniciativa de Nokia con sus nuevos iPhones, cabe recordar el popular modelo dorado del 5S; y, ahora, el fabricante surcoreano ha buscado alejarse de su típica paleta de colores.

Más allá de ese aspecto, el Galaxy J es, en gran medida, un dispositivo con una serie de características de última generación, puesto que cuenta con la potencia del Galaxy Note III y el tamaño del Samsung Galaxy SIV.

Dicho esto, vale precisar que incorpora un procesador Snapdragon 800 SoC de cuatro núcleos a 2,3 GHz y una pantalla de 5 pulgadas Full HD super AMOLED (1.920 × 1.080 píxeles).

Entre otras especificaciones técnicas, figura 3 GB de memoria RAM, soporte LTE-A y una batería de 2.600 mAh. Con respecto a la cámara, la trasera cuenta con 13 megapíxeles mientras que la delantera posee 2 megapíxeles. El terminal correrá incluso con Android 4.3, la última versión del robot verde.

Mientras tanto, con 146 gramos de peso, el Galaxy J es compatible con el reloj inteligente de Samsung, el Galaxy Gear, de manera que la lista de dispositivos móviles compatibles con el referido smartwatch crece un poco más.

A finales de octubre, el nuevo smartphone llegará a las tiendas de Japón a un precio de 20.000 yenes, que equivale a US$ 205. Empero, aún se desconocen planes en torno a un despliegue internacional -apuntan desde el portal BGR-.