Silicon Valley tiene más poder que nunca. Sin embargo, según los últimos rumores, avalados por el estancamiento de la creación de empleo y de los precios de las viviendas en la zona, la falta de productos nuevos que entusiasmen al gran público y una caída de las inversiones, Silicon Valley habría tocado techo.
¿Estamos ante un declive? Es probable. Silicon Valley siempre se caracterizó por un ciclo de auge y crisis de cuatro años. Sin embargo, hay muy buenos motivos para creer que no sólo Silicon Valley regresará más fuerte que nunca, sino que afianzará aún más su posición frente a todos sus rivales como la capital mundial de la alta tecnología. Estas son las razones:
El éxito genera éxito. Según un importante informe elaborado por el Proyecto de Competitividad e Innovación de Silicon Valley, el dominio de la región aún es decisivo.
Mientras hace una década los varios centros tecnológicos de EE.UU. mostraron una estabilidad relativa en la creación de empresas de alto valor, Silicon Valley (incluyendo a San Francisco) ha dado un salto.
En 2012, el trabajador medio de Silicon Valley generó un 50% más de producción por año que el trabajador medio de EEUU en 2012, según Collaborative Economics.
La larga ola. La mayoría de los observadores aprecian el ciclo de cuatro años de Silicon Valley, pero pocos han notado un ciclo mucho más largo, de 20 años. Durante casi dos décadas desde el comienzo del auge de las empresas tecnológicas, Silicon Valley ha sido dominado por el software.
Ahora estamos en la era de los aparatos. Al final, esta época dará lugar a un Silicon Valley más parecido al de la era de la calculadora o del PC, en la que llegará el declive de las redes sociales, que encuentran cada vez más detractores.Este cambio ya está en marcha. No olvidemos que el epicentro de Silicon Valley siempre se ha desplazado.
Población. Aunque Silicon Valley es una de las comunidades más multiculturales de EEUU, la formación de esas comunidades es aún más importante. Es dos veces más probable que el inmigrante del Valley tenga un título universitario a que lo tenga el inmigrante medio de EEUU. A diferencia de los otros centros tecnológicos, el flujo neto de estos inmigrantes sigue aumentando con rapidez. Si el pasado es un precedente, esto acelerará la creación de nuevas empresas.
Infraestructuras. Silicon Valley concentra los mejores ingenieros del mundo y las mejores empresas de servicios para dar apoyo a los emprendedores. Las grandes universidades —Stanford, Berkeley y Santa Clara cuentan con el apoyo de muchas otras universidades e instituciones educativas.
Los últimos años han sido testigos de la llegada de laboratorios de investigación y diseño de empresas como BMW y Mercedes, Samsung y Nissan, e incluso General Electric. Es más, este sigue siendo el centro mundial de la inversión de riesgo: las inversiones de riesgo totales en Silicon Valley (incluyendo a San Francisco) este año superaron al resto de EEUU, según la firma de análisis de inversión CB Insights.
Es posible imaginar un “Gran Silicon Valley” en 2050 que se extienda sobre un área mucho mayor, aunque para ello habrá que introducir profundos cambios en el sistema de transporte del estado de California.
Capaz de reinventarse a sí mismo y volver a liderar la economía global, Silicon Valley necesita otro líder para enfrentar los grandes cambios por venir.