Una combinación de smartphone y tableta es lo que acaba de presentar la firma taiwanesa durante el Mobile World Congress. Padfone Infinity se ha convertido así en un teléfono inteligente capaz de convertirse en una tablet, al ser colocado en un display de mayor tamaño.

El smartphone fabricado con aluminio posee una pantalla de 5 pulgadas Full HD pero al ser insertado en el ‘Padfone Station’ se tiene como resultado una tablet de 10 pulgadas con resolución de 1080p, logrando incrementar -exponencialmente- la autonomía de su batería de 19 a 40 horas.

El terminal tiene un procesador Qualcomm Snapdragon 600 de cuatro núcleos a 1,7 GHz para un alto rendimiento, funciona con el sistema operativo Android Jelly Bean (4.2) y cuenta con conexión LTE.

Entre otras características, cuenta con 2 GB de memoria RAM, posee 64GB de capacidad de almacenamiento y 50 GB adicionales a través del servicio Asus WebStorage.

Padfone Infinity tiene, además, una cámara de 13 megapíxeles que permitirá captar imágenes incluso en ambientes con poca luz. Asimismo, se podrán capturar 100 fotografías con una velocidad de 8 fotogramas por segundo.

El equipo saldrá a la venta en Taiwán en abril, también estará disponible en otros países. El precio inicial es cercano a los US$ 1200.