La empresa con sede en Cupertino, en un esfuerzo por no perder (o recuperar) su factor ‘cool’, registró la patente Personal computing device control using face detection and recognition ante la Oficina de Marcas y Patentes de EE.UU.
El documento describe un método para acceder a un iPhone y otros dispositivos, en función a la detección y reconocimiento facial. En otras palabras, el rostro del usuario podría actuar a modo de contraseña, lo que le permitiría contestar una llamada y realizar otras tareas.
Ahora bien, los analistas de la industria sustentan que esa tecnología estará incorporada en el próxima generación del iPhone. DailyMail asegura que algunos
dispositivos Samsung Galaxy ya utilizan el reconocimiento facial para el desbloqueo, pero ese mecanismo podría “ponerse en juego” para el iPhone 6.
Eso no es todo. El citado medio señaló, en base a rumores recientes, que el sucesor del 5S tendría una pantalla de 4,8 pulgadas y podría estar hecha de zafiro, un material bastante resistente.
Según Mirror, “Apple ha gastado US$ 578 millones para acelerar el desarrollo de su siguiente teléfono”. Específicamente, habría invertido ese monto en el fabricante GT Advanced Technologies. Eso respaldaría la predicción de los expertos sobre la apuesta de la manzana por un terminal súper resistente.
El cristal de zafiro es 2,5 veces más resistente, más caro y más difícil de producir que el Corning Gorilla Glass, un material que la compañía tecnológica utiliza hoy en día en sus smartphones.
Recordemos que el iPhone 5S ya incorpora un cristal de zafiro, pero solo en la lente de la cámara trasera y en el botón del TouchID.
Mientras tanto, los últimos trascendidos indican que la nueva generación de iPhones incluiría un sensor 3D. Esas versiones surgieron después de que Apple adquiriera PrimeSense, una empresa desarrolladora de chips que permiten visión artificial en tres dimensiones.
James McQuivey, de la compañía de análisis de tendencias Forrester, considera que el gigante de la manzana va a mirar “más allá de la sala de estar.” Para él, la tecnología desarrollada por PrimeSense se ha hecho tan pequeña que pronto se podría incorporar en el próximo iPhone, dándole la capacidad de detección en 3D.
“Esto permitiría a alguien tomar una imagen de un objeto o persona para determinar el tamaño y hasta la masa (…) Suena técnico, pero un teléfono con esa capacidad podría quizás tomar la imagen de su refrigerador y ser capaz de recomendar inmediatamente equipos nuevos que llenarían el mismo espacio exacto”, refirió en conversación con El Informador de México.
EL DATO
Se espera que el próximo iPhone esté disponible en el mercado durante la primavera de 2014.
