(AFP).- Los dirigentes de todo el mundo felicitaron a Donald Trump, cuya elección a la presidencia de Estados Unidos preocupa a Alemania y Francia y alegra a Rusia, Israel y a la extrema derecha europea.
El triunfo de Trump “abre un período de incertidumbre”, declaró el presidente francés Francois Hollande, que envió un mensaje de felicitación “como es natural entre dos jefes de Estado democráticos”.
Hollande llamó además a una “Europa unida” para defender sus valores, poco después de que el primer ministro húngaro, Viktor Orban, populista de derechas, celebrara “una excelente noticia”.
En sintonía con Orban, Marine Le Pen, candidata de la extrema derecha a la elección presidencial francesa del 2017, felicitó a Trump.
Berlín predijo, por su parte, tiempos “más difíciles”, y la canciller Angela Merkel propuso a Trump una “cooperación estrecha” basada en valores comunes.
Los presidentes del Consejo Europeo, Donald Tusk, y del ejecutivo comunitario, Jean-Claude Juncker, felicitaron a Trump y lo invitaron a viajar a Europa para celebrar una cumbre.
Desde Moscú, el presidente Vladimir Putin felicitó rápidamente a Trump con un telegrama en el que abogó por un “trabajo mutuo para sacar a las relaciones entre Rusia y Estados Unidos de su situación crítica”.
Algunos dirigentes tuvieron que tragarse sus críticas de los últimos meses a Trump y cambiarlas por felicitaciones. Es el caso del primer ministro canadiense, Justin Trudeau, que se declaró “impaciente por trabajar de forma muy estrecha” con el futuro inquilino de la Casa Blanca.
En primera línea cuando Trump anunció su intención de crear un muro en su frontera con México, el presidente mexicano Peña Nieto se limitó a decir que está “preparado para trabajar” con el futuro inquilino de la Casa Blanca.
El presidente boliviano, Evo Morales, felicitó a Trump en Twitter. “Esperamos trabajar contra el racismo, el machismo, la antiinmigración, y por la soberanía de nuestros pueblos”, escribió.
Su vicepresidente, Álvaro García Linera, calificó la elección del republicano de “retroceso de los procesos de globalización” y opinó que quizá se trata del cambio “más drástico” de la política estadounidense en las últimas décadas porque una persona que no proviene de la élite está en el Gobierno”.
En Asia, el nuevo presidente recibió la felicitación del primer ministro japonés, Shinzo Abe, que recordó el vínculo estrecho que une a sus países.
“Japón y Estados Unidos son aliados firmes, unidos por valores comunes como la libertad, la democracia, los derechos humanos básicos y el estado de derecho”, señaló Shinzo Abe en su mensaje.
En Oriente Medio, la Autoridad Palestina exhortó a Trump a trabajar para la creación de un estado palestino.
“Estamos dispuestos a trabajar con el presidente electo en base a una solución de dos Estados con el fin de establecer un Estado palestino en las fronteras de 1967”, dijo a la AFP el portavoz de la Autoridad Palestina, Nabil Abu Rudeina.
Sin embargo, el ministro de Educación israelí, líder del lobby de los colonos judíos, consideró que la idea de un Estado palestino está superada tras la victoria de Trump.
“La victoria de Trump ofrece a Israel la posibilidad de renunciar inmediatamente a la idea de creación de un Estado palestino”, afirmó Bennett en un comunicado. “Esta es la posición del presidente electo” y la “era de un Estado palestino ha quedado atrás”, añadió.
Irán exhortó al futuro presidente estadounidense a “respetar los acuerdos” internacionales firmados por Washington.
Más allá de las reacciones más convencionales, algunos intentaban guardar la calma. “Los vínculos UE-USA son más profundos que cualquier cambio político”, afirmó la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, mientras el Gobierno francés recordaba que el acuerdo de París sobre el clima no podrá cuestionarse.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, reafirmó por su parte que el liderazgo de Estados Unidos es “más importante que nunca”.