Washington, (AP).- Con su gobierno en gestación ya bajo críticas, el presidente electo Donald Trump sopesaba el lunes impulsar nueva diversidad en el Partido Republicano y recomendar que una mujer presida esa fuerza política y que un hombre abiertamente homosexual represente a Estados Unidos ante las Naciones Unidas.
Ambas propuestas, entre las decenas sopesadas por el equipo de transición de Trump, siguen a la intensa reacción adversa que suscitó la decisión del magnate de nombrar a Steve Bannon, un personaje muy apreciado por el movimiento nacionalista blanco, para que sea su principal estratega y asesor.
“Después de ganar la presidencia pero perder el voto popular, el presidente electo Trump debe intentar la unidad de los estadounidenses, no continuar atizando las llamas de la división y la intolerancia”, declaró la líder demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
La legisladora describió el nombramiento de Bannon como “una señal alarmante” de que Trump “continúa comprometido con la visión de odio y división que caracterizó a su campaña”.
Sin embargo, cuando faltan 66 días para que Trump asuma la presidencia, su equipo minimizó el lunes las críticas y tenía la vista puesta en los centenares de nombramientos de alto nivel necesarios para gobernar a la nación más poderosa del mundo.
El presidente electo sopesa proponer a Richard Grenell como el embajador de Estados Unidos ante las Naciones Unidas. Si es escogido al cargo y el Senado lo ratifica, Grenell se convertirá en la primera persona abiertamente homosexual que ocupe un puesto diplomático a nivel de gabinete.
Grenell ya fue portavoz estadounidense ante la ONU durante el gobierno del presidente George W. Bush.
Al mismo tiempo, Trump sopesa seleccionar a la presidenta del Partido Republicano en Michigan, Ronna Romney McDaniel, sobrina de Mitt Romney, uno de los detractores del magnate y candidato presidencial en 2012. McDaniel podría convertirse en la primera mujer en décadas en encabezar al Comité Nacional Republicano.
“Me interesará cualquier cosa que desee el señor Trump”, declaró McDaniel el lunes a The Associated Press. Agregó que por lo pronto tiene pensado buscar de nuevo la presidencia del Partido Republicano en Michigan.
El nombrar a McDaniel para que encabece el brazo político del Partido Republicano podría ser un esfuerzo dirigido a que el organismo político supere la indignación suscitada por los comentarios de menosprecio a las mujeres que hizo Trump durante la campaña.
El nombramiento de Grenell podría comenzar a sosegar las preocupaciones entre la comunidad homosexual ante las posturas del vicepresidente electo Mike Pence sobre los matrimonios entre personas del mismo sexo cuando fue gobernador de Indiana.
Estos cambios de personal que están siendo analizados fueron confirmados por personas enteradas directamente de la visión de Trump, pero que no están autorizadas a revelar públicamente deliberaciones sostenidas en privado. Las fuentes subrayaron que las decisiones no eran todavía definitivas.
Las deliberaciones internas sobre el personal tienen lugar un día después de que Trump diera cabida a círculos republicanos rivales con el nombramiento de Bannon y el del presidente del Comité Nacional Republicano, Reince Priebus, como secretario general de la Casa Blanca.
Ambos estaban en la lista de seleccionados de Trump para el cargo de secretario general. Si bien fue Priebus quien consiguió ese puesto, también se espera que Bannon tenga una influencia considerable.
Trump otorgó un puesto prominente al exejecutivo de medios, que dirigía un cibersitio atractivo para la llamada “alt-right” (derecha alternativa), un movimiento asociado con frecuencia a los intentos de la extrema derecha para preservar la “identidad blanca”, oponerse a una sociedad multicultural y defender los “valores occidentales”.
Priebus defendió el lunes al magnate de medios, al afirmar que ambos formaron una pareja efectiva al guiar a Trump a un triunfo sobre Hillary Clinton y hacia la presidencia. Trató además de distanciar a Bannon de los titulares provocadores de su portal, diciendo que fueron escritos por otras personas no identificadas.
“Juntos hemos conseguido manejar muchas de las decisiones de la campaña”, dijo Priebus en el programa “Today” de la NBC. “Ha resultado muy, muy bien”.
Los nombramientos de Trump fueron a primera vista contradictorios, aunque encajan en la costumbre del célebre empresario de crear un verdadero test de Rorschach que le permitió a sus seguidores ver lo que ellos querían.