En los últimos meses se ha resaltado el rol protagónico que jugará la COP 20 en Perú para lograr un acuerdo climático vinculante en el 2015; pero más allá de los discursos políticos y las buenas intensiones, ¿cuáles son las metas y expectativas que giran alrededor de la cumbre en diciembre en Lima?
“Esperamos que la reunión en Lima nos dé claridad sobre la información que cada país necesita para trazar sus objetivos más allá del 2020, que es cuando el nuevo acuerdo global se empezará a aplicar”, dijo el Embajador de Australia para el Cambio Climático, Justin Lee.
Lee, quien hace poco visitó Lima para reunirse con funcionarios del Ministerio del Ambiente (Minam), afirmó que la segunda expectativa es desarrollar un texto de negociación para este nuevo acuerdo y que este incluya los compromisos de todos los países en la negociación. “En Lima vamos a definir los elementos de ese texto de negociación”.
En tercer lugar, el Gobierno australiano espera compartir experiencias sobre las acciones que se pueden realizar ahora para prevenir el impacto del cambio climático de cara al 2020. “Si bien el nuevo acuerdo se aplicará a partir de ese año, necesitamos ver qué podemos hacer antes”, dijo el funcionario, quien también se reunió con representantes de la Cancillería peruana y líderes de la sociedad civil durante su visita.
“El trabajo que se haga en la COP 20 de Lima sentará las bases para ese acuerdo, necesitamos avanzar en algunos temas importantes, muchos de ellos son muy técnicos pero en un nivel político. Es importante que el evento en Lima brinde un impulso positivo para avanzar hacia París el próximo año”, agregó.
[ ¿Por qué le conviene al Perú promover un desarrollo bajo en emisiones? ]
Mitigar y adaptarse
Uno de los temas sensibles e importantes que se intentará resolver en la próxima COP 20 -según Lee- es cómo abordar la mitigación y adaptación al impacto del cambio climático, lo cual incluye el apoyo para los países más vulnerables y en vías de desarrollo.
“No se trata solo de reducir emisiones sino también de ayudar a los países a adaptarse al cambio climático. Es muy importante para los países mantener un equilibrio entre estos temas”, comentó en diálogo con Gestion.pe.
Sobre este punto, Lee recordó que entre el 2010 y 2013 su país aportó 600 millones de dólares australianos (US$ 523 millones) a un fondo climático internacional de ayuda rápida para llevar a cabo iniciativas de adaptación y mitigación en países en desarrollo.
“Hemos tenido metas en el pasado y las hemos cumplido. Ahora el siguiente paso es saber que haremos hacia el 2020 y en adelante. Es obvio que se necesita hacer mucho más porque la magnitud de la tarea es muy grande. Las emisiones globales siguen creciendo. Ahora hay muchas nuevas economías emergentes que tienen mayores emisiones, por lo tanto tenemos que ayudarles a implementar mejores tecnologías para que no sigan los métodos del pasado, que dependían mucho de los combustibles fósiles”, explicó.
Por último, el funcionario australiano recalcó que el uso de tecnologías limpias y energías renovables como alternativa a las fuentes de energía tradicionales no significa sacrificar el desarrollo y crecimiento económico de los países, y además reiteró la necesidad de unir esfuerzos para lograr el objetivo de mantener el aumento de la temperatura media global por debajo del nivel de 2 grados centígrados.