El secretario general del Sindicato del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa), Moisés Crispín Marín, informó que la medida se acordó el miércoles en vista que los directivos se niegan a acatar un acuerdo al que llegó, el 7 de setiembre pasado, la alta dirección del Ministerio de Agricultura

La medida, según indicó el dirigente consiste en suspender el concurso público mediante el cual se despedirá a cerca de 1,500 inspectores sanitarios que están bajo el régimen de Contrato Administrativo de Servicios (CAS), pese a que laboran entre 15 y 20 años en la institución.

Crispín Marín advirtió que Las importaciones y exportaciones de diversos productos agropecuarios quedarán paralizadas con la huelga general indefinida.

Explicó que con la protesta se paralizarán las inspecciones fitozoosanitarias del control de plagas -como la mosca de la fruta que ataca frutas y hortalizas–, que los inspectores de Senasa realizan en puertos, aeropuertos y fronteras de todo el país.

Tampoco se emitirán permisos sanitarios de importación, como los de aves y huevos procedentes de Chile, y se suspenderá la entrega de certificaciones de registro sanitario, autorizaciones para exportaciones de productos y del tránsito de ganado y de productos agropecuarios, que originará que las cargas no puedan ingresar ni salir del país.

La respuesta
Al respecto, el Senasa informó que no ha despedido a ninguno de sus trabajadores, los cuales continúan laborando con normalidad y que actualmente se encuentra realizando un proceso de contratación de servidores bajo el régimen CAS.

Señalaron que la protesta anunciada por un grupo de trabajadores se debe a que buscan que los contratos CAS se renueven automáticamente, lo cual no se puede hacer. A nivel nacional sus servidores del campo con contrato CAS también están participando en el concurso. El mismo Sindicato los ha motivado a participar, validando la convocatoria. Hasta el momento alcanza más de 3800 postulantes.

“Los servidores del campo que van a postular nuevamente a un puesto CAS, no lo hacen con las manos vacías puesto que han ganado y acumulado experiencia y preparación”. Expresó la institución .

El CAS se viene desarrollando todos los años. Es un contrato de corto plazo, cuando se acaba se vuelve a convocar, como se hace cada cierto número de meses, tras el cumplimento de objetivos.

La institución señaló que guarda coincidencias con los servidores que se encuentran protestando, como el mejorar las condiciones laborales dentro de lo que permite la Ley y aseguró que trabajará sobre esas coincidencias.