EFE.- El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, prometió el lunes hacer de la educación y el cuidado de los niños una prioridad de su Gobierno por encima del equilibrio fiscal tras ganar un nuevo mandato en elecciones legislativas, en momentos en que el veloz envejecimiento de la población amenaza sus esfuerzos por reactivar la economía.
La coalición oficialista de Abe logró una victoria aplastante en las urnas el domingo, ayudada por sus promesas de campaña de invertir más en educación y el cuidado de menores, en parte alentada por la necesidad de incentivar a más mujeres a unirse a la fuerza laboral.
El primer ministro también dijo que seguirá presionando a las cautelosas firmas japonesas para que inviertan sus enormes volúmenes de efectivo en mejorar los salarios de sus empleados, a fin de avivar el ciclo del crecimiento mediante el consumo.
Ante la continuidad de su llamada estrategia “Abenomics” enfocada en una política monetaria ultra relajada, el sólido triunfo de Abe también aumentó las expectativas de que Haruhiko Kuroda vuelva a ser nombrado gobernador del Banco de Japón a inicios de abril cuando expire su actual mandato de 5 años.
El triunfo electoral de Abe elevó las acciones globales y el dólar el lunes, además de enviar al índice referencial de la bolsa de Tokio, el Nikkei, a máximos de 21 años.
Abe llegó al poder en el 2012 tras prometer revivir la economía japonesa, la tercera más grande del mundo, luego de casi dos décadas de deflación y estancamiento.
La economía se está recuperando gradualmente pero el lento crecimiento de los salarios mantiene los gastos de los consumidores y la inflación débiles, aunque las empresas afrontan una escasez de trabajadores debido a la baja tasa de natalidad y al rápido envejecimiento de la población.
El primer ministro prometió ofrecer educación preescolar gratuita para todos los niños entre 3 y 5 años y para los bebés de 2 o menos años de familias con rentas más bajas.
“La clave para el crecimiento sostenido de Japón es cómo respondemos al envejecimiento de la población, que es el mayor desafío del ‘Abenomics’”, dijo Abe en rueda de prensa.
Si Japón aplica de inmediato la educación preescolar gratuita para todos los niños, esto tendría un costo de 1,2 billones de yenes (10.540 millones de dólares), de acuerdo a estimaciones del Gobierno.