Bloomberg realizó un extenso análisis sobre la compleja situación política del gobierno y la presidenta Michelle Bachelet, a la luz de los históricos niveles de rechazo ciudadano hacia su gestión.
El artículo denominado “La Presidenta que prometió mucho ve cómo se evapora su popularidad”, sostiene que la caída en su respaldo se convierte en una amenaza para su ambicioso paquete de reformas.
Para Bloomberg, el escándalo Caval en el que está involucrado su hijo, Sebastián Dávalos, es el mayor golpe que ha recibido la mandataria.
A continuación, el artículo completo:
(Bloomberg) La Presidenta Michelle Bachelet debe estar preguntándose cómo todo ha salido tan mal tan rápido.
A menos de dos años de haber ganado una segunda administración con el mayor margen electoral desde el retorno a la democracia en 1990, sus niveles de aprobación han descendido a un histórico 24%.
Las acusaciones de amiguismos y mala administración económica han minado el apoyo de parte de los sectores más pobres, los que le han dado la espalda a la persona que alguna vez la defendieron, según muestran las encuestas de opinión.
La ex prisionera política y cabeza de ONU Mujer inició su segundo período en marzo del año pasado con promesas de reformas al sistema neoliberal impuesto por el ex dictador Augusto Pinochet. Se haría una revisión al sistema de impuestos, leyes laborales, educación, salud, pensiones y a la Constitución. Hoy, en medio del menor crecimiento económico en seis años, sus promesas electorales se ven desesperanzadamente ambiciosas.
“El gobierno tendrá que rendirse a la idea de hacer lo que originalmente planeó”, dijo Cristián Bellolio, Analista Político de la Universidad Adolfo Ibañez, desde Londres. “Ahora, las prioridades son la reactivación de la economía y atacar la delincuencia”.
Tanto el Banco Central como el gobierno han cortado sus pronósticos de crecimiento en los últimos dos meses debido al fin de un boom minero de 10 años y a la preocupación por el programa de reforma que arrastró la confianza empresarial a su nivel más bajo desde 2008. Con esto, el gobierno ahora espera crecer un 2.5% por debajo del 3.6% esperado en el presupuesto 2015, realizado el año pasado.
Sin rendirse
Moderar el paquete de reformas no será fácil. Bachelet se ha comprometido a un “realismo, sin renuncia” de sus promesas de campaña a medida que crece la oposición a los cambios. Muchos en Chile se preguntan en qué queda el paquete de reformas.
“Lo más probable es que en el país siga habiendo desorden”, dijo Patricio Navia, cientista político, desde la Universidad de Nueva York. “El gobierno seguirá incapaz de sacar la economía del estancamiento, ya sea por dar marcha atrás y moderar las reformas o seguir adelante con los cambios más radicales”.
El índice de aprobación de Bachelet decayó a 24% en agosto según la encuesta AdimarkGfK, el porcentaje más bajo desde que comenzó esta medición en 2006. La calificación está por debajo del 54% que tuvo cuando asumió el poder y está lejos del 84% obtenido cuando su primer mandato terminó cuatro años antes. Incluso, dentro del tercio más pobre, la aprobación de la presidenta llega al 24%.
Y las noticias siguen empeorando. Su apoyo a la reforma educacional ha caído a 39% del 58% marcado en mayo de 2014, mientras que el apoyo a cambios en las leyes laborales ha caído a 31% del 53% percibido en lo que va del año.
Gran golpe
El mayor golpe a la presidenta vino de su propia familia, cuando su hijo fue acusado de usar sus influencias para la obtención de un préstamo por parte de su esposa para la compra de una propiedad en febrero. Él ha negado cualquier acción errónea.
“La gente estaba a la espera que la Presidenta hiciera frente a las desigualdades de un país que crece y desarrolla, pero ella no terminó con los abusos de poder y la economía se ha estancado”, declaró Navia.
Sin embargo, aún hay un grupo que es incluso menos popular que el gobierno, que es la coalición de la oposición conocida como la Alianza, que también se ha visto debilitado por un escándalo de financiamiento irregular de sus campañas. Su índice de aprobación ha caído a 15%, en comparación con el 16% para el gobierno, según Adimark.
Pero, Bachelet no es la única en América Latina. A medida que el crecimiento se tambalea en toda la región, la Presidenta de Brasil, Dilma Rousseff ha visto caída su calificación al 8%. También, Ollanta Humala en Perú ha reducido su aprobación a 17%, y en Venezuela, Nicolás Maduro se encuentra en 22.7%.
La desconfianza en Chile se ha extendido a todos los ámbitos de la sociedad, incluidos el Congreso y el mundo empresarial, que culpan al paquete de reformas del gobierno de socavar la inversión, según la encuenta Adimark.
“Estamos en un triángulo de desconfianza”, dijo el jueves el subsecretario de Hacienda, Alejandro Micco, refiriéndose a la comunidad empresarial, el gobierno y la sociedad civil, mientras que invitó a todos a trabajar juntos para impulsar el crecimiento.
“Va a ser difícil impulsar la confianza en la comunidad empresarial y el gobierno si la sociedad no cree una palabra de lo que alguno de nosotros decimos”, dijo.
Diario Financiero de Chile
Red Iberoamericana de Prensa Económica (RIPE)