El ministro del Interior, José Luis Pérez Guadalupe, informó que en un plazo de 30 días la Policía deberá establecer los protocolos necesarios para que adecuarse al Decreto Legislativo N° 1182, que regula el uso de los datos derivados de las telecomunicaciones para la identificación, localización y geolocalización de equipos telefónicos usados para la delincuencia y el crimen organización.
“En el tema de la geolocalización, y está en la ley, se dan 30 días para que la Policía pueda establecer los protocolos adecuados y 30 días adicionales para que las cuatro operadoras puedan adecuarse”, dijo luego en los exteriores de Palacio de Gobierno luego del Mensaje por Fiestas Patrias.
Sin embargo, precisó que los operadores de telefonía móvil ya pueden almacenar los datos de las comunicaciones pero se requiere un mandato judicial dictado por la Fiscalía de la Nación y el Poder Judicial.
“Ahí sí queda claramente establecido que no son escuchas, son solamente la localización de los aparatos celulares, es decir, de ahora en adelante, si a alguien lo están extorsionando pues sale el número de quien hace la extorsión entonces se puede ubicar (al equipo) dentro de las 24 horas de flagrancia”, dijo.
En ese sentido, mencionó que esta iniciativa ayudará muchísimo no solo en los casos de teléfonos robados por delincuentes sino también para identificar los números que brindan los sicarios para que sean contratados.
“Y tal como ha dicho el presidente, la complicidad para el sicariato también estará penado”, enfatizó en alusión a las páginas de Facebook en la que algunas personas promueven el sicariato.
Asimismo, mencionó que la norma dictada por el Poder Ejecutivo establece claramente los casos de sicariato en los que se aplicará cadena perpetua a los implicados, lo que incluye a las organizaciones delictivas que hay en algunos barrios de Lima y Callao.
Indicó que las normas publicadas por el Poder Ejecutivo en materia de sicariato comprenden modificaciones al Código Penal y no se necesitará reglamento alguno para su pronta vigencia.
