Los asesinatos perpetrados por bandas de narcotraficantes en las calles de Lima y de otras ciudades importantes del país ha aumentado el temor de los ciudadanos, tanto que una inmensa mayoría piensa que el Perú se está encaminando a ser un narcoestado.
La encuesta Pulso Perú, que toma como base las entrevistas de Datum Internacional a 1,200 personas en Lima y otras ciudades del país, también advierte que las principales instituciones están infiltradas por el narcotráfico.
En cuanto a la corrupción, la mayoría de los encuestados sostiene que entidades públicas y privadas conociendo de esa práctica ilegal no hacen nada para deternerla.