Después de que el Gobierno declarara el estado de emergencia por 30 días en provincias de Apurímac y Cusco , el presidente del Consejo de Ministros, Pedro Cateriano , defendió la decisión antes de su reunión con el alcalde de Lima, Luis Castañeda.

“Invoco a la calma. Hemos decretado el estado de emergencia para que se restablezca el orden en la zona (…). Estos actos no tienen justificación alguna. El ministro de Salud ha estado la semana pasada dialogando con las autoridades y los pobladores de la zona para superar los problemas existentes. El camino es el diálogo, no el uso de la violencia”, comentó.

Pedro Cateriano destacó que el proyecto minero demandó una inversión de US$ 10,000 y que significará para el próximo año un 1.4% del PBI, por lo que lo consideró el “proyecto más importante de la historia del Perú”.

“No podemos que un grupo de gente dirigida con fines políticos entorpezca un proyecto que se ha venido desarrollando con normalidad”, aseveró.

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