(Reuters) Un proyecto para habilitar la reelección presidencial en Paraguay, que desató disturbios en la capital el fin de semana, quedó en suspenso en el Congreso mientras la clase política busca una salida a la crisis desatada cuando fue aprobado por un grupo de senadores, dijo el titular de la Cámara de Diputados.
La iniciativa fue avalada a puertas cerradas en una oficina del Congreso por legisladores que desconocieron la autoridad del presidente del parlamento para convocar a sesión, desatando las peores protestas en dos décadas.
Manifestantes irrumpieron en la sede del Congreso y lo incendiaron el viernes, en una noche de enfrentamientos y destrozos en varias partes de la ciudad.
La policía entró en la sede del opositor Partido Liberal disparando y mató a un joven dirigente, avivando el malestar que le costó sus puestos al ministro del Interior y al jefe de la policía.
Pedido de diálogo
El presidente Horacio Cartes, haciéndose eco de un pedido del Papa Francisco, llamó a una mesa de diálogo con la Iglesia, representantes de los tres poderes públicos y de los principales partidos políticos.
“Mientras la mesa de diálogo esté funcionando y tratando de llegar a las soluciones de los problemas que tenemos, la Cámara de Diputados no va a tocar el tema enmienda”, dijo el lunes el titular de la Cámara Baja, el oficialista Hugo Velázquez.
La Constitución de 1992 prohíbe la reelección presidencial, pero legisladores leales a Cartes buscan desde hace meses una enmienda que lo habilite.
Para ello, senadores modificaron los reglamentos internos a fin de avanzar con la propuesta, que también beneficiaría al ex presidente Fernando Lugo.
La fiscalía ordenó la clausura temporal de la sede del Congreso. El presidente del parlamento de Paraguay, el opositor Robert Acevedo, y otros senadores pidieron a la Corte Suprema de Justicia que se pronuncie sobre las irregularidades.
Una nueva manifestación con banderas blancas fue convocada para la noche del lunes frente a la sede del legislativo, donde algunos jóvenes recogían firmas para frenar el proyecto.